La mayoría de los 530 graduados comenzó la carrera en 2003, aunque había varios de generaciones anteriores. Se recibían ayer tras finalizar el internado, que abarca el último año de la currícula y que va desde cada 1º de agosto al 31 de julio siguiente, cada generación de graduados se congrega allí anualmente.

Todos los consultados por la diaria coincidieron en señalar que la atención sanitaria funciona mejor desde la creación del Sistema Nacional Integrado de Salud, que comenzó a aplicarse en 2008.

Explicaron que tienen buenas perspectivas laborales y todos acotaron que se especializarán, "si no te especializás estás en el horno", graficó una de ellas. Los entrevistados mencionaron que el mecanismo de ingreso al ámbito público es mediante concurso pero en el privado "el apadrinamiento es fundamental, en la medida que uno no lo tenga, tiene que optar por sus buenos conocimientos y hacer una buena prueba de residencia", comentaron Verónica, Pablo y Carlos. Al ser abordados los galenos no hicieron diferencia en preferir ejercer en instituciones públicas o privadas, sólo una precisó: "En ámbitos privados podría ejercer pero me gustaría entrar en Salud Pública porque está rebueno y uno también quiere devolver un poco de lo que le dio la facultad".

La salud rural es uno de los programas que el Ministerio de Salud Pública (MSP) considera prioritarios para desarrollar y para eso ha anunciado una serie de estímulos para que los médicos se radiquen en el interior del país. Eliana, graduada procedente de Salto, dijo que volverá a su ciudad pero que recién podrá hacerlo después de especializarse en dermatología puesto que sólo puede formarse en Montevideo. A su vez, Jimena valoró: "Más allá de las intenciones, que están buenas y que son necesarias, la formación todavía está toda en Montevideo, la especialización se ha descentralizado muy poco, cuando uno recién se recibe quiere seguir formándose y para eso te tenés que quedar en Montevideo".

El nivel

Los entrevistados valoraron de buena manera a la carrera de medicina de la Universidad de la República (Udelar). Como puntos débiles comentaron la extensión y, principalmente, la escasa práctica que tienen los estudiantes durante los primeros años de estudio. "No tenés contacto con el paciente hasta cuarto, hasta ahí no sabés si te gusta o no", indicó Karen. Pablo comentó: "El internado aporta muchísimo y se da en el último año, ahí realmente aprendés lo que es tomar decisiones, estás vos solo y tenés que manejarte con los recursos que hay. Yo a la carrera le veo mucha teoría, en lo práctico te encontrás con otras realidades".

Carolina, graduada que cursó el séptimo año en República Checa, opinó que "comparando los dos países la carrera de acá es muy buena, es sólida", aunque aclaró: "Igual depende de cada uno, de cómo vaya buscándose las cosas". Otros señalaron que es necesario ser "muy autodidacta en muchos puntos porque no están todos tan contemplados". Michelle, paraguaya que cursó en Uruguay el internado, indicó estar satisfecha con lo recibido aquí y cotejó que el plan de Udelar en medicina es muy similar al de la facultad pública donde cursó en Paraguay.

Dos de las carencias mencionadas por los graduados fueron modificadas en el plan de estudio aplicado desde 2009, que disminuyó dos años la extensión de la carrera -ahora es de seis y medio- y en el que los estudiantes tienen contacto con los pacientes desde el primer año. Jimena agregó que otra virtud del plan actual es que incorporó la formación en habilidades comunicacionales y ética médica: "Se está intentando mejorar en ese sentido, los chiquilines tienen contacto con la comunidad desde primer año, por lo menos es una sensibilización, después cada uno verá qué camino toma pero la facultad toma un poco de partido en ese sentido".

Ámbito político

Respecto al cambio de autoridades en el MSP hubo quienes dijeron no estar en condiciones de evaluarlo, otros consideraron que era “una cuestión política más macro” y algunos ven de buena manera que al estar encaminada la reforma las riendas sean tomadas por especialistas de la salud. Sobre temas como el aborto, varias opiniones indicaron la necesidad de legalizarlo, aunque uno de los consultados reparó que “es un asunto político que corresponde a otra esfera”. Hubo quien consideró que “es matar una vida” y agregó que “es mejor enseñar a las personas a no embarazarse”; otra opinó: “Como médicos somos conscientes de la realidad, pila de mujeres se hace abortos en condiciones muy malas. La ley que tenemos ahora es mejor que no tener nada pero hay que mejorarla”. Otro respondió con sinceridad que el estado etílico no le permitía responder nada sobre esa cuestión en ese momento.