Ayer muchos uruguayos no salían de su asombro ante la noticia que estalló durante el fin de semana sobre la detención y el posterior procesamiento con prisión de tres personas, dos de ellas por homicidio especialmente agravado en reiteración real, al haber asesinado con inyecciones de morfina y aire a 16 pacientes.
Los gremios de la salud que no se reunieron el domingo lo hicieron ayer y emitieron comunicados resolutivos dirigidos a la opinión pública. En todos se repudió el accionar del enfermero que se desempeñaba en neurocirugía de la Asociación Española y del funcionario que lo hacía en la misma mutualista y en la unidad de cardiología del Hospital Maciel. Se los consideró casos excepcionales que nada tienen que ver con el estrés que viven los trabajadores del sector.
El Sindicato de Trabajadores no técnicos de la Asociación Española expresó que lo ocurrido son “hechos que sólo pueden ser cometidos por personas con un desequilibrio psicoemocional que no forma parte del normal relacionamiento entre seres humanos”. El accionar de los dos enfermeros y de la jefa de enfermería que los cubrió fue considerado además un acto que empaña “el desempeño de los 4.000 funcionarios no técnicos de la Española y el resto de más de 40.000 enfermeros de todo el país”.
Por su parte, la dirección de la institución sanitaria evaluó que los hechos marcan la presencia de “una modalidad sorpresiva e inédita, nacidos de conductas individuales criminales, [que] vulneraron los protocolos de control, que se ajustan a la normativa nacional e internacional existente orientados a la prevención de mala praxis”.
Desde la Federación Uruguaya de la Salud (FUS) se catalogó de “asesinos seriales” a quienes fueron procesados por el juez penal Rolando Vomero y se expresó preocupación por que “no se rompan los mecanismos de confianza existentes entre los pacientes y los médicos”, indicó Jorge Bermúdez, secretario general de la FUS. Asimismo, destacó que “no es un tema sindical ni político”, por lo que la federación colaborará con el Departamento de Vigilancia de la Dirección General de Lucha contra el Crimen Organizado del Ministerio del Interior.
Crisis hospitalaria
El Ministerio de Salud Pública (MSP), tras declararse en sesión permanente y convocar el Comité de Asesoramiento de Seguridad del Paciente, anunció las medidas que implementará para enfrentar la situación. La División de Habilitación Sanitaria del MSP desarrollará una investigación administrativa en las dos unidades involucradas. Asimismo, se creará una Unidad de Información y Apoyo a la Población (08004444) y un número de teléfono (1524600) para la orientación de las denuncias para la investigación; se brindará apoyo psicológico a las familias perjudicadas por medio del Programa de Salud Mental y a los equipos de salud para prevenir el síndrome de burnout, sensibilizar y capacitar. Se definió además que la Comisión de Seguridad Nacional del Paciente funcione en sesión permanente para incrementar los controles en situaciones irregulares de muerte sin diagnóstico claro, y se promoverá una auditoría de habilitación de todas las unidades de cuidados especiales del sector público y privado.
Por último, autoridades y funcionarios de Salud Pública consultarán a David Jaimovich, experto argentino en crisis hospitalarias. En tanto, el ministro de Salud Pública, Jorge Venegas, será recibido el jueves por las comisiones de Salud de las cámaras de Senadores y Diputados.