El vicepresidente Danilo Astori presentó ayer los contenidos centrales del informe elaborado por la coordinación política del Frente Liber Seregni (FLS). En el primer activo del espacio que conforman, entre otros sectores, Asamblea Uruguay, Nuevo Espacio, Alianza Progresista y Banderas de Liber, que tuvo lugar ayer en el Centro de Vendedores y Viajantes de Plaza, Astori marcó diferencias con “la derecha” y planteó temas que deben formar parte de un debate ideológico que “hace tiempo se debe” el Frente Amplio (FA).

El vicepresidente, único orador ayer, escogió centrarse en lo que definió como los “grandes significados y tendencias” de los siete años transcurridos de gobierno del FA. Entre ellos, mencionó que la coalición de izquierda demostró que “la construcción de igualdad puede ser condición de la política económica y no mero subproducto”, que los jóvenes uruguayos “ya no incluyen en sus planes de vida la posibilidad de abandonar el país”, que se generó una cultura del trabajo y de responsabilidad social y que se concretó una orientación basada en el “radicalismo democrático”.

Regionalismo cerrado

Al igual que en una de sus últimas columnas de opinión, Astori fue muy crítico ayer con el funcionamiento del Mercosur. Alertó de una situación de “deterioro institucional” a raíz del “no cumplimiento de las normas básicas que acordamos con nuestros socios”, de la “inexistencia o inoperancia de los mecanismos de solución de controversias” y de que se han dado “situaciones absolutamente inencuadrables en los tratados fundacionales”. Dijo que hay una “enorme dificultad para llevar adelante un enfoque como el que Uruguay defiende” dentro del Mercosur, que es el del regionalismo abierto, ya que se está dificultando “el acceso al mundo en su conjunto, que para Uruguay es fundamental”. Sostuvo que el gobierno aspira a “tener en la región un proyecto de cooperación que signifique mucho más que comprar y vender con facilidad” y que incluya acuerdos productivos, científicos, culturales, y acceso concertado a los organismos multilaterales. Esto, acompañado de “niveles de flexibilidad suficiente y disposición a acordar con otros fuera de la región acuerdos preferenciales”.

En su discurso hubo referencias críticas al rol que desempeña la oposición. Evaluó que “en el discurso de la derecha” no hay “absolutamente ninguna propuesta”. Señaló que ésta “intenta transmitir la loca idea de que practicamos la misma política económica que ellos practicaron en el país”, que “ocultan u opacan todos los avances en protección social y le caen con mucha dureza a lo que ellos llaman la gestión del gobierno”. “Decir que acá hay continuidad de la política económica es absolutamente insostenible; no manejamos igual ni un solo instrumento”, sostuvo el vicepresidente.

No obstante, mencionó como materias pendientes del actual gobierno el “desafío impresionante en materia de infraestructura” y la necesidad de “elevar la calidad de la gestión”. “La gestión no es sólo un conjunto de procedimientos, de intervenciones en la práctica tendientes a asegurar que se cumplan las políticas; la comunicación también es una parte esencial de la gestión, la explicación de lo que estamos haciendo, de hacia dónde vamos”, apuntó.

A la interna

Astori remarcó que la actitud política del FLS será “de lealtad institucional inquebrantable hacia nuestro gobierno y hacia nuestro presidente Pepe Mujica”. “Queremos actuar con mucha fraternidad, con mucha hermandad con nuestros compañeros. Yo estoy seguro de que no hay compañeros en el FA que crean que la fraternidad y el altruismo en política signifique callar diferencias cuando las tenemos, tendremos que buscar la mejor manera de expresarlas, porque siempre se pueden expresar de manera que no lastimen, que sean comprendidas, asimiladas y útiles para todos”, manifestó.

Sin hacer referencias concretas, pero en probable alusión al debate planteado por autoridades de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) y por el asesor presidencial en temas económicos Pedro Buonomo respecto de la necesidad de profundizar la redistribución de la riqueza, Astori llamó a tener “cuidado con los atajos”. “Cuidado con querer cortar camino, porque eso nos puede conducir a efectos contradictorios respecto de aquellos que decimos perseguir”, alertó. Enfatizó que se debe hacer un análisis “muy riguroso de los equilibrios internos que tienen los cambios que ha venido llevando adelante el FA desde el gobierno para tener claras las opciones de posibles aceleramientos”, ya que de lo contrario “se elige un campo para acelerar y se produce un retroceso irreversible”. Remarcó que se debe tener la convicción de que hay que “mantener la orientación” que han tenido hasta ahora los gobiernos del FA. Agregó que “equilibrio no significa parálisis” y que para que no haya parálisis debe profundizarse la discusión democrática a todo nivel en el FA, sin entrar en una “lucha por el poder que no puede ser nunca el alma de la acción política de la izquierda”.

Apuntó que debe concretarse un debate ideológico a la interna de la coalición, entre otros temas, sobre lo público y lo privado y sobre las relaciones del Estado con la sociedad civil. Advirtió que es necesario evitar los maximalismos (como las afirmaciones de que “no puede haber ningún aspecto importante de la sociedad que no maneje el Estado, o viceversa”), los estereotipos (como la creencia de que todo lo que resuelve el Estado se cumple tal como lo resolvió, o, en el otro extremo, que la libre acción de las fuerzas del mercado conduce al equilibrio) y las etiquetas (como “capitalismo con rostro humano” o “transición al socialismo”). El vicepresidente señaló que se tiende a confundir lo público con lo colectivo y lo privado con lo individual, lo cual es “falso”. Remarcó también que el espacio público trasciende el sector público e incluye los intereses de la sociedad en su conjunto. “En la sociedad en su conjunto pasan cosas importantes y no dentro de la órbita estatal”, indicó.

La presentación de los lineamientos del documento del FLS, a tres años de creado el espacio, fue el puntapié inicial para una serie de actividades que se organizarán con militantes y con la sociedad en general, con miras a debatir ideológicamente sus contenidos. A fines de 2013 habrá un encuentro para sintetizar estas discusiones.