Profesores y adscriptos se encontraban conversando en la adscripción del liceo Nº 16 del Prado de Montevideo, cuando ingresó la directora con un arma y preguntó quién tenía problemas con ella. Ante la mirada atónita de los trabajadores accionó el arma, que no estaba cargada. Marcos Fernández, docente de Geografía del liceo, explicó en diálogo con la diaria que todo se trató de un “chiste” pero “de muy mal gusto”. Antes de ingresar a la adscripción le pidió su arma al seguridad 222, quien se la dio ante la insistencia de la autoridad aunque previamente la descargó.

Docentes y trabajadores del liceo hace un año y medio se manifiestan contra la directora y han hecho denuncias formales ante autoridades y consejeros de Secundaria. Malos tratos, mal manejo del liceo y gritos a los trabajadores son algunos de los aspectos denunciados y que han generado “condiciones de desánimo en general entre profesores y alumnos”, indicó Fernández.

Ayer, tras el episodio con el arma descargada, autoridades del Consejo de Educación Secundaria (CES) y representantes sindicales se hicieron presentes en el liceo en forma inmediata. “Se nos prometió de forma oral la garantía de que la directora no va a pisar más el liceo, pero no es suficiente porque no queremos que pise ni el liceo ni ningún liceo del país”, sentenció.

Por su parte, la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria anunció en un comunicado que el sindicato ya había denunciado a la directora “en reiteradas oportunidades” por sus “prácticas antipedagógicas en el centro educativo a su cargo”. “Por tanto, le compete al CES la responsabilidad de haber omitido actuar al respecto”.

Ayer las clases se suspendieron y hoy no se retomarán; sí habrá una asamblea de funcionarios y una instancia de taller coordinada por el equipo técnico del CES especializado en trabajar casos de violencia. Hoy los trabajadores resolverán si las clases se reinician mañana.