Al cierre del 5º Encuentro Nacional de Estudiantes de Bachillerato realizado en Paso Severino, Florida, cuando concurrió el presidente, José Mujica, se evidenció una puja interna. Algunos estudiantes cuestionaron la legitimidad del grupo que el 19 de setiembre fue recibido en la Torre Ejecutiva por Mujica, autoridades del Ministerio de Educación y Cultura y del Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública (Codicen-ANEP).
El tema saltó a la agenda mediática y política. El mandatario lo trató en dos de sus audiciones radiales y el lunes 24 lo introdujo en el Consejo de Ministros para que el gabinete intentara viabilizar las propuestas. La más difundida fue la sugerencia de extender el uso del uniforme a todos los liceos públicos del país. Se escucharon voces disonantes, como la de Emiliano Mandacen, dirigente de la Asociación de Docentes de Enseñanza Secundaria de Montevideo, que en diálogo con Montevideo Portal cuestionó la “representatividad” de los estudiantes que asistieron al encuentro y opinó que algunas de las iniciativas habían sido “digitadas” por las autoridades de la educación.
En Paso Severino nadie se refirió a esa reunión porque la Mesa Permanente Nacional de Estudiantes de Educación Secundaria, organizadora del encuentro junto con el Proyecto de Participación del Consejo de Educación Secundaria (CES), consensuó no incluir el tema en las jornadas.
Fue el propio Mujica quien lo mencionó en Paso Severino. “Están cuestionando la representatividad, [que] no tienen modelo de delegados”, deslizó. Fue el insumo necesario para que Federico Charlo, integrante de la Mesa Permanente Nacional de Estudiantes de Educación Secundaria, delegado departamental de los grupos de bachillerato de Flores, pidiera el micrófono. “Usted dijo que había algunos que cuestionaban la representatividad de los estudiantes que fueron a la reunión. Yo soy uno de ésos”, asumió, y señaló que los delegados no fueron electos por el Encuentro Nacional de Estudiantes.
Ayer, en diálogo con la diaria, Charlo explicó que en febrero se desarrolló en Rivera el Encuentro Binacional de Estudiantes al que asistieron miembros de la Mesa Permanente Nacional de Estudiantes de Secundaria (de bachillerato), de la Mesa Representativa de UTU y del Parlamento Juvenil del Mercosur, y que allí se creó el Consejo Nacional de Estudiantes. Charlo criticó que ese consejo haya obtenido el reconocimiento del Codicen y de algunos consejos pero indicó que “no fue validado por el Encuentro Nacional de Estudiantes, que es el único que cuenta con la legitimidad para crear o modificar reglamentos”.
Luego de escuchar a Charlo, Mujica afirmó: “No es a mí al que le toca juzgar si es representativo o no, son ustedes, y los pleitos que pueden tener ustedes los tienen que discutir y decidir entre ustedes y no tengo que intervenir yo [...] La representatividad la eligen y la deciden ustedes y después si quieren hablar me piden y yo con mucho gusto los escucho”. Tras su intervención, un integrante del Consejo Nacional de Estudiantes aclaró que las propuestas que habían llevado se habían tratado en Paso Severino y en el encuentro de estudiantes de UTU, realizado en Piriápolis, y que el Consejo Nacional de Estudiantes “no representa, sólo coordina, buscamos viabilizar las propuestas”. El tema quedó por ésa y dejó el ambiente enrarecido.
Puesto rentado
Charlo también rechazó la forma en que se designó a los miembros del consejo: “Se eligieron por mensaje de texto y de Facebook enviados a los mismos elegibles”. Agregó: “En una de las reuniones de la mesa permanente nos enteramos de que uno de los estudiantes que dice ser delegado es a su vez contratado por Presidencia de la República”. Esa versión fue confirmada por autoridades de la educación.
Por otra parte, Charlo reprobó que las propuestas tomadas de los encuentros de estudiantes de Paso Severino que el Consejo Nacional de Estudiantes extendió a Mujica no respetaron el documento elaborado por la mesa representativa, sino que se hizo “un recorte, una interpretación personal”. Varios de esos temas estaban en sintonía con la perspectiva de Presidencia y esa conexión -de la que un tanto se deslindó Charlo- también molesta.
Respecto de la discrepancia, Ema Zaffaroni, consejera del CES, dijo a la diaria que desde 2006 el organismo ha dado ciertos apoyos para que los estudiantes formen sus propias estructuras. Indicó que hace algunos meses el Codicen y sus subsistemas recibieron a integrantes del Consejo Nacional de Educación pero dijo desconocer “cómo funciona ese consejo y cómo fueron elegidos los representantes”. Agregó: “Los organismos que reconocimos, avalamos y apoyamos son las mesas permanentes y los encuentros de Paso Severino”.
Consultada sobre si el CES intervendrá para limar asperezas, opinó: “No nos corresponde que las autoridades empiecen a tallar en sus conflictos. Quizá ofrecer una intermediación o alguna reu-nión conjunta, si el CES puede servir para dirimir sus diferencias, encantados de hacerlo, siempre que ellos decidan que sea así”.