Terminada la revisión de los votos para la defensoría de lectores de la diaria recibidos del 24 de noviembre al 7 de diciembre, anunciamos que resultó electa Daniela Couto, de 36 años, licenciada en Ciencias de la Comunicación, periodista free- lance, editora y correctora.

Couto, fundadora del sitio web Cursos para/lelos, recibió 79 votos. La siguieron Maximiliano Xicart con 55, Matías Matta con 24, Karinna Tarragona con 21, Gustavo Pereira con 20, Martha Silva con 12 y Mauro Prat con 9.

Según se indicó cuando convocamos a presentar candidaturas, la tarea de la defensoría es contribuir a un aprendizaje para que mejoren tanto el producto periodístico como los mecanismos de demanda y control por parte de quienes lo leen.

Esto se lleva a cabo mediante la identificación de problemas (señalados por quienes lo leen o por iniciativa propia de la defensoría), su evaluación (mediante el contacto con las personas responsables de lo publicado) y la propuesta de soluciones para prevenir que se reiteren.

La difusión de las conclusiones de la defensoría (por lo menos una vez al mes en la edición de papel, y sin limitaciones de frecuencia ni de espacio en nuestro sitio de internet) sirve para que quienes leen la diaria aumenten su conocimiento de los procesos periodísticos, sean más capaces de discernir las causas de los problemas y logren una interacción más productiva con quienes trabajan en este medio de comunicación.

Los mensajes de lectores a la defensoría serán publicados en el sitio de internet de la diaria, tras una revisión a cargo de Couto para asegurar que no aparezcan textos ajenos a la finalidad del espacio y que sean posibles, en consulta con los lectores, eventuales ajustes.

Al final de cada año de trabajo, la defensora de lectores deberá presentar un balance de su actividad en ese período, que será publicado por la diaria.

Couto asumirá sus funciones el año que viene (en fecha a acordar con ella, de acuerdo con las vacaciones que tenga previstas), por un período de dos años y con posibilidad de ser reelegida. Si decide renunciar, deberá exponer las razones, que serán publicadas por la diaria.

Las autoridades de la diaria o 10% de las personas titulares de suscripciones tienen el derecho de plantear en cualquier momento la remoción de la defensora de lectores. Para ello deberán exponer sus razones, que serán publicadas por la diaria, y se realizará un referéndum del mismo modo en que se llevó a cabo la elección. Para que la remoción sea aprobada, deberá contar, como mínimo, con el respaldo de un porcentaje de los suscriptores igual al que determinó la elección.

A continuación reproducimos la declaración de propósitos presentada por la ganadora:

“Según cuentan, una de las quejas más recurrentes en la bandeja de entrada de la defensoría de lectores de la diaria no es la perspectiva desde la cual se encaró cierta noticia política ni por qué en una nota se consultó a determinado especialista y no a otro, o qué razones llevaron a publicar una noticia que nada tendría que ver -según la visión del lector- con su línea editorial. Al parecer, en el podio de los reclamos, la medalla de oro iría para 'Hoy no me llegó el diario'.

En términos económicos, la diaria es un producto. Como tal, la exigencia de hallarlo de lunes a viernes en su puerta es lo mínimo que pretende toda persona que lo adquiere a cambio de un desembolso monetario. Por esa razón, reclamar su ausencia es más que válido.

Pero la diaria también es un producto periodístico. Como tal, la exigencia de hallar en ella información relevante, en la que se consulte a todas las fuentes pertinentes, presentada con la mayor claridad posible y bien redactada, es lo mínimo que debería pretender toda persona que la consuma. Por esa razón, reclamar la presencia de todos esos elementos no sólo es conveniente sino necesario.

Ante la pareja importancia de ambas demandas, la única distinción posible es el destinatario. Si el reclamo es por el envase, diríjase al departamento de suscripciones. Si le faltó el contenido o el mismo estaba defectuoso, acuda -entonces sí- a la defensoría de lectores.

El desempeño del cargo de defensor se basa -en gran medida- en la visión más objetiva posible, por lo que aunque su tarea sea amparar al lector eso no implica que siempre vaya a darle la razón a su reclamo. Por mi parte, mis intenciones como postulante son lograr la mejor comunicación posible entre los suscriptores y el medio, estimular aun más la participación de los primeros ya sea a través de las vías ya utilizadas hasta ahora como de las redes sociales, con la intención incluso de crear cuentas con ese objetivo. Como puente entre el medio y los usuarios, el propósito es que la tarea esté sujeta a los principios periodísticos básicos relativos a lo ético y la calidad de la información y su presentación”.