En primera fila estaban el presidente José Mujica y varios de sus ministros, y más atrás en la platea el vicepresidente Danilo Astori, que escuchaba los discursos de los dirigentes sindicales acompañado, entre otros, por el ministro de Economía, Mario Bergara. Ambos escucharon uno de los reclamos que realizaron Fernando Pereira y Gabriel Molina, quienes hicieron los discursos ayer como integrantes del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT, que proponía elevar el mínimo no imponible del IRPF y eliminar el impuesto para el aguinaldo y el salario vacacional, partidas que según afirmó Pereira, “pueden dar un desahogo al trabajador”. Astori dijo que uno de los objetivos de la reforma tributaria es la equidad, por lo que mejorar la carga tributaria “en el sentido de hacerla más llevadera, es una de las metas permanentes del sistema”, pero afirmó que la vía para hacerlo “puede ser lo que ellos proponen u otras”. Bergara aseguró que el planteo debe discutirse “con serenidad, fuera de la lógica electoral”, y apuntó que seguramente sea un “punto de discusión para el próximo gobierno”.
El asador
La polémica por la participación de dirigentes sindicales en el asado en el Quincho de Varela, vecino de José Mujica, estuvo presente en el acto. Fernando Pereira afirmó al comienzo de su discurso que el movimiento sindical es “democrático”, y “no le dice a la gente qué tiene que votar ni con quién tiene que comerse un asado”. A la reunión en el Quincho, al que estaban invitadas unas 300 personas, concurrieron embajadores de otros países en Uruguay (repitió la de Estados Unidos Julissa Reynoso) y empresarios (de nuevo estuvo Laetitia D’Arenberg). Mujica, que no quiso hablar con la prensa en el acto, dijo al llegar al quincho de Sergio Varela que los trabajadores “no se tienen que ofender por esto. Varela ha sido mi amigo en las difíciles, es un bolichero mayorista, un trabajador”. Afirmó que en la reunión “no hay un criterio de clases, hay un criterio de amistad y humanidad. Éste es el país republicano”. Saludó el acto del PIT-CNT pero criticó que no se haya hablado sobre violencia doméstica. Dijo además que en Uruguay falta “más compromiso con el trabajo” y que el ausentismo es “notable” en el ámbito público.
Otro de los debes señalados fue la falta de inversión estatal, en particular en el tren. “El transporte ferroviario necesita una mano del Estado. Tiene que tener un impulso para que el tren empiece a andar otra vez”, reclamó Molina. Más adelante, Pereira planteó que no puede haber sueldos de menos de 20.000 pesos en la educación, reivindicó el 6% del Producto Interno Bruto para el presupuesto educativo, y afirmó que la política de tierras “no puede quedar liberada a las leyes del mercado”, por lo que hay que “poner límites a su extensión”. El dirigente pidió además que se revise “la política de exoneraciones al capital”, aseguró que “no se le ha dado la suficiente atención al sector público” y a su negociación colectiva, y descartó las críticas contra la participación de los trabajadores en los organismos de gobierno de la educación, la salud y la seguridad social: “¿Cómo se puede bloquear algo con una minoría?”, cuestionó.
La secretaria de Equidad y Género de la central sindical, Victoria Fagián, reclamó por los derechos de las trabajadoras rurales, que “siguen siendo de segunda clase”, alertó sobre la trata de personas, en particular por inmigrantes de República Dominicana, y exigió respuesta ante los asesinatos de “siete compañeras transexuales que siguen impunes”.
Aunque Pereira afirmó que el PIT-CNT es la central sindical de América Latina que más jornadas de movilización y paro ha realizado en los últimos años, los dirigentes no dudaron en reconocer los avances que se han logrado, entre ellos el aumento de sueldos en la educación y en el sector comercio y el aumento de las jubilaciones. “Todo eso es producto de los Consejos de Salarios. ¿Eso es poder sindical? No, eso es democracia, eso es discutir de par en par con los dueños de los medios de producción, arrancarles a través de los Consejos de Salarios un poquito de la ganancia”, afirmó Molina, que aseguró que defenderán esa herramienta “como defendimos a la democracia”. “Hay algunos gobiernos que han sido más sensibles a los reclamos de los trabajadores, y no me tiembla la boca, en nombre del Secretariado, al decir que de 2005 a la fecha ha habido cambios sustanciales de las relaciones laborales en este país”, reafirmó, ante la mirada de los tres legisladores de la oposición que concurrieron al acto: Pablo Abdala y Álvaro Delgado, del Partido Nacional y Fernando Amado, del Partido Colorado.
Afuera nadie se entera
Aunque siempre se reciben denuncias de trabajadores cuyas empresas los presionan para trabajar el 1° de Mayo, este año se comprobó una denuncia muy concreta: el Disco de Maldonado y La Cabaña de El Pinar (gestionada por Disco) anunciaron a sus empleados, mediante un cartel, que debían ir a trabajar el feriado, y que quienes no fueran no recibirían la partida por presentismo. Ante la denuncia de la Federación Uruguaya de Comercio y Servicios (FUECYS), la Inspección General de Trabajo intimó a Disco a que “echaran para atrás” o de lo contrario el ministerio tomaría medidas, según afirmó el ministro de Trabajo y Seguridad Social, José Bayardi.
La intimación, a la que tuvo acceso la diaria, recuerda que ya hubo denuncias por casos similares a la empresa Disco (que integra junto con Devoto y Géant el grupo Casino), por no otorgar el presentismo por faltas justificadas (como las habilitadas por ley para hacerse exámenes como el PAP). El inspector de Trabajo, Juan Andrés Roballo, dijo que la situación es reiterada, y que es “ilegítima, tal como dan cuenta la doctrina y la jurisprudencia”. Explicó que es doblemente grave, porque además de que no se puede obligar a trabajar en un feriado no laborable y pago, “amenazar con perder el presentismo es especialmente bravo”. A su entender, podría ser una práctica calificada como “antisindical o de discriminación sindical, porque es el 1° de Mayo”, un día “para la conmemoración y la reivindicación de los derechos de los trabajadores. Es muy negativo”.
La empresa se expone a sanciones y el gremio “no la va a dejar pasar”. Están planificando movilizaciones a Punta del Este, informó Ismael Fuentes, dirigente de la federación. “Presiones siempre hay, la diferencia es que en algunos lugares no hay organización sindical y no se sabe, pero cuando empieza a haber organización el sindicato cumple ese papel, para que estas cosas salgan a la luz”, valoró. Durante su discurso, Molina denunció que La Cigale estuvo abierta ayer. “Hay que decirle a los dueños no sólo que está frío para tomar helado, sino que hoy es el Día de los Trabajadores. Los tiempos han cambiado”.