La Intendencia de Montevideo decidió que este año el certamen de Reina del Carnaval estará abierto a la participación de discapacitadas, mujeres trans y mayores de 25 años. Esto generó el rechazo de importantes figuras del mundo del carnaval, como Enrique Espert, presidente de DAECPU, quien aseguró que estas personas deberían hacer un concurso aparte. Ante las críticas que se le realizaron por esta propuesta, Espert aclaró: “Yo no digo de expulsar a esa gente del carnaval. Estos certámenes paralelos los organizaríamos nosotros, recaudaríamos por las entradas, cobraríamos los derechos de televisación, presionaríamos a los jurados y todo eso. Pero sería algo diferente de la Reina del Carnaval”. Espert también rechazó la idea de que en el carnaval uruguayo exista discriminación. “En el carnaval siempre han salido homosexuales y prostitutas. Además, los parodistas toda la vida subieron travestis a las bañaderas para que se las mamaran entre tablado y tablado. ¿Eso es discriminar? Claro que no. Pero ojo: el hecho de que haya travas confraternizando con los integrantes de los conjuntos no les da derecho a desfilar mezclados con las mujeres de verdad”. De todas maneras, Espert reconoció que, llegado el caso, en DAECPU están dispuestos a “negociar”. “Si viene un puto cualquiera, dicho con todo el respeto del mundo, y quiere participar en el certamen, lo vamos a echar a patadas. Pero si el homosexual en cuestión es hijo de alguien bien, como el Tano Gutiérrez, que tiene una hija preciosa que salió reina del carnaval, lo podemos considerar. Y si es un poco bobito también”.

Con respecto al aumento del límite de edad (hasta ahora no podían participar mayores de 25 años), Espert aseguró que es una medida “absurda”. “El límite de edad no existe, porque en el concurso nunca se dejó participar a viejas de más de 21 años. Ahí siempre son pendejas, y eso tiene una razón. La pendeja es muy virginal, después de los 21 o engordan, o se casan, o se convierten en trolas. Dicho esto con todo el respeto del mundo”.