La Asamblea General del Claustro (AGC) de la Universidad de la República (Udelar) postergó hasta el 10 de junio la toma de postura sobre el proyecto de ley de creación del Sistema Nacional de Competitividad (SNC) ya remitido por el Poder Ejecutivo al Parlamento. De todas formas, en su última sesión, que se realizó el jueves, la AGC comenzó a considerar el tema, y, en la misma línea de lo que ya había ocurrido en el Consejo Directivo Central (CDC) de la institución, primaron las críticas y la preocupación sobre los efectos que podría tener la iniciativa en el ámbito de la ciencia y la tecnología. El rector de la Udelar, Roberto Markarián, pidió a la AGC que fije una posición a la brevedad para que la Udelar tome una postura institucional que él pueda trasladar a los ámbitos a los que lo convocan.

En el proceso de discusión interno, la Udelar organizó un debate sobre el proyecto de ley del SNC, en el que varios académicos cuestionaron buena parte del texto. Una de las que más críticas hizo al proyecto de ley fue la coordinadora académica de la Comisión Sectorial de Investigación Científica (CSIC) de la Udelar, Judith Sutz, que fue invitada a la AGC para exponer sobre la propuesta del gobierno.

Sutz consideró que el proyecto de ley surge principalmente de la Oficina y Planeamiento y Presupuesto para articular las instituciones públicas uruguayas en busca de mejorar la competitividad del país. Dijo que el concepto de competitividad que emplea la propuesta del Ejecutivo es principalmente económico. Para ilustrarlo, mencionó que el Gabinete de la Competitividad que se propone crear está compuesto únicamente por ministerios vinculados a la productividad, y al igual que lo había hecho antes, llamó la atención sobre la ausencia del Ministerio de Educación y Cultura en ese ámbito.

Además, reiteró sus críticas al nuevo lugar institucional que el proyecto de ley le otorga a la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), que pasaría a responder al Ministerio de Economía y Finanzas. Sutz también criticó que en la propuesta del Ejecutivo se elimine la obligación de diálogo con el Consejo Nacional de Innovación, Ciencia y Tecnología (Conicyt), organismo instaurado por la ley que creó la ANII.

“Inadecuado”

Ante un planteo de la Udelar, el Conicyt y la Academia Nacional de Ciencias, que expresaron preocupación por lo dispuesto en el proyecto de ley, el presidente de la República, Tabaré Vázquez, decretó días atrás la creación de una comisión -integrada por esas tres instituciones y también por representantes del Poder Ejecutivo- que proponga una nueva institucionalidad a nivel estatal en materia de ciencia y tecnología. A partir de este nuevo escenario, Sutz manifestó incertidumbre acerca de los pasos que se propone dar el gobierno, porque por un lado el Poder Ejecutivo creó esa comisión, pero a la vez el proyecto que crea el SNC está a estudio de otra comisión parlamentaria. “¿Cuál es la lógica de realizar una transformación mediante una ley cuando el mismo tema se discute en una comisión?”, se preguntó la académica.

Además de estas cuestiones “de procedimiento”, Sutz criticó otros aspectos “del fondo” del proyecto. La académica se desmarcó de la idea de que si se pone a la ciencia y la tecnología bajo la órbita de la competitividad se genera un sistema económico más productivo. Según ilustró, se intentó hacer algo parecido durante el gobierno de Sebastián Piñera en Chile, cuando se intentó poner al Conicyt de ese país bajo la égida del Ministerio de Economía, proyecto que naufragó “porque los científicos lo impidieron”. La docente también compartió el caso de un proyecto similar en el gobierno de Mariano Rajoy en España, que sí llegó a concretarse pero que no logró atacar la “debilidad estructural” de ese país para lograr ser competitivo económicamente. Sutz dijo que este tipo de propuestas van “en dirección contraria” a las tendencias actuales a nivel mundial.

Como un buen ejemplo de este tipo de políticas, nombró el consejo de innovación que implantó Suecia este año, que está compuesto por los ministerios de Economía, Industria, Medio Ambiente y Educación, además del primer ministro, que es quien lo preside. Según aclaró, la tendencia internacional muestra que la innovación es inducida por la demanda, pero los organismos que dirigen el proyecto del SNC del gobierno uruguayo “están del lado de la oferta”. Todos estos elementos llevaron a Sutz a afirmar que el proyecto de ley en cuestión “es inadecuado”. Para la académica, en caso de que el proyecto sea aprobado sin modificaciones por el Parlamento, debería quitarse todo el capítulo 3, que refiere al nuevo rol de la ANII. Para ello, habría que aclarar que la ley se referiría solamente al desarrollo productivo y a la inserción internacional, y que la innovación y la tecnología deberían ser legisladas en una ley posterior, según opinó.

Daniel Buquet, representante por el orden Docente de Facultad de Ciencias Sociales, valoró que el proyecto “subsume” a la ciencia y la tecnología colocándolas por debajo de la competividad, y advirtió que esto “las va a terminar matando”.