Después de que el lunes se suspendiera una instancia de negociación prevista, los gremios de estudiantes de Formación Docente se reunieron el viernes con autoridades del Consejo de Formación en Educación (CFE). El objetivo era dialogar sobre los reclamos de los estudiantes, que incluían el incremento de la cantidad y el monto de becas, el pago de algunas prácticas curriculares, la construcción y refacción de salones de clase y la accesibilidad de los edificios. Consultada por la diaria, la integrante del Centro de Estudiantes del Instituto de Profesores Artigas (CEIPA) Camila Menchaca indicó que en la reunión los gremios plantearon su malestar por la suspensión del encuentro del lunes poco tiempo antes de la hora en que fue convocado, y cuando representantes de los centros de estudiantes del interior ya estaban en viaje rumbo a Montevideo. Además, señaló que respecto de las reivindicaciones, sólo llegó a hablarse del tema de las becas, y el CFE propuso a los gremios que integraran la comisión de becas del organismo, junto con la representante estudiantil en el consejo, propuesta que analizarán. Menchaca señaló que el CEIPA no respalda la gestión de la representante de los estudiantes en el CFE, y que los gremios que sí lo hacían dejaron de hacerlo después del conflicto educativo de las últimas semanas.
El CEIPA emitió una declaración en la que responde a dichos que la presidenta del CFE, Ana Lopater, realizó en entrevista con la diaria (ver http://ladiaria.com.uy/articulo/2015/9/ley-de-atraccion). Lopater había dicho que en su momento los estudiantes se negaron a integrar la comisión de becas porque no se sintieron “suficientemente representados”, a lo que el gremio responde que tanto el CEIPA como la Coordinación de Centros de Estudiantes de Formación en Educación reivindican “autonomía y cogobierno reales”.
“Las condiciones actuales que pautan el funcionamiento del CFE responden a hacer trascender la política vertical del poder político de turno, generando pequeñísimos espacios de seudo participación, a una parte de los actores que constituimos la realidad educativa; ya que ni funcionarios ni egresados tienen espacio en CFE. Por tanto, Lopater tiene que considerar que el CEIPA anhela participar en aquellos espacios que se propongan como realmente autónomos y con cogobierno de bases; no va a aceptar avalar políticas verticalistas conformando un somero acto participativo para llenar retinas”, agrega la declaración, que aclara que de cinco consejeros, tres son nombrados por el Poder Ejecutivo y los dos restantes ejercen la representación de docentes y estudiantes.
Cambio de planes
Además, el CEIPA señala que pese a que el CFE publicó en un documento que el Plan de Estudios se modificaría “a partir de la evaluación del anterior y con una visión universitaria [...], promoviendo una amplia participación de los diversos actores”, el gremio no ha sido convocado a ninguna instancia que lo ponga al tanto del tema. El CEIPA sostiene que no existe tal participación amplia, algo “ya sabido desde 2006, cuando se desconocieron por completo las resoluciones emanadas del Congreso Nacional de Educación Julio Castro y de otras múltiples instancias posteriores”.
La declaración agrega que el CEIPA no cree que “deba tener la potestad de dirigir la educación y ser mayoría”, sino que “quiere ser considerado y respetado dentro de un marco orgánico democrático, autónomo, cogobernado desde la base, gratuito, con presupuesto digno que responda a las necesidades existentes”. El CEIPA entiende que se debe tender “a la construcción de políticas educativas con características emancipadoras, humanizadoras, en contraposición de un sistema educativo actual que responde estrictamente a los intereses funcionales del mercado”. El gremio analiza que el presupuesto “insuficiente” de la educación pública financia “a la empresa de la educación privada”, contribuyendo “con un proceso de privatización de la educación en los hechos, consensuando la pauperización del sistema de educación público, dejando sin posibilidades de educar en condiciones dignas a los sectores populares de la población”.
Además, plantean que la Asociación de Estudiantes de Educación Social y el Centro de Estudiantes de Magisterio también se encuentran en conflicto y realizaron movilizaciones y ocupaciones en Montevideo y en el interior.