En Mercedes se dictará la carrera de tecnólogo en Jazz y Música Creativa, diseñada para “formar músicos intérpretes de jazz y otros ámbitos de su influencia, con una visión abierta del género; abordando a modo de introducción las áreas de composición, arreglos y orquestación”. Un relevamiento realizado en 2013 por la Utec en Mercedes identificaba como demanda la formación artística en jazz y música popular; Silveira explicó que el peso del Movimiento Cultural Jazz a la Calle, que funciona con distintas actividades en Mercedes desde hace diez años, tiene mucho que ver en eso. “La música creativa y el jazz han adquirido un desarrollo propio y peculiar en la región; el Movimiento Jazz a la Calle moviliza y acerca a la música creativa a muchísimos niños”, afirmó. Comentó que sería un error pensar que el objetivo de la carrera es formar profesores de música; explicó que, por un lado, el perfil del egresado apuntará a músicos creativos profesionales e implicará una carrera en la que “arte y tecnología van juntos”. A la vez, se buscará que sea una carrera con formación complementaria de otras: “¿Por qué un ingeniero puro y duro no puede tomar horas de jazz y música creativa como parte de su proceso de tener la cabeza abierta?”. Puso como ejemplo de uno de los perfiles a los que podría apuntar la carrera el trabajo del luthier, que “hace 50 años lo que sabía era una especie de manualidad, adquiría conocimientos y capacidad para hacer una guitarra, mientras que ahora el mundo tecnológico puede ayudarlo muchísimo a fabricar mejores instrumentos”. Aseguró que el plan de estudios será muy flexible y creativo, pero exigente y de alta calidad.
Al norte
Otra de las carreras nuevas, que comenzarán en 2017, será la de ingeniería en Logística, que se instalará en Rivera. La necesidad de formación en esa área también surgió de los relevamientos que hizo la Utec en 2013 en la zona, que tiene una extensa frontera seca. Silveira informó que en la región hay 11.000 jóvenes de entre 17 y 25 años que terminaron secundaria y no están estudiando una carrera universitaria, y ahora se ve como “un acierto” la planificación de esta carrera en el norte del país, donde podría instalarse una tercera planta de celulosa. “Uruguay tiene poca gente con el expertise necesario en ese rubro específico”, afirmó.
Otra de las carreras nuevas, que también se dictará en Rivera, es la de tecnólogo en Mecatrónica Industrial. Apunta a mejorar la automatización de los procesos productivos con la incorporación de tecnología. Esta opción tendrá la particularidad de que se está trabajando para que sea una carrera binacional, tomando en cuenta la cercanía con Santana do Livramento. En Rivera la Utec ya tiene un predio asignado dentro del campus universitario, y se estima que la obra puede estar lista para comienzos de 2018.
En Durazno se creará la carrera en Ingeniería en Sistemas de Riego, Drenaje y Manejo de Efluentes, que estará orientada a la “problemática del uso racional y sostenible de los recursos hídricos y al tratamiento de efluentes en los sectores agropecuario y agroindustrial”. También se implementará la carrera de Ingeniería en Energías Renovables, que combina las de Ingeniería en Energía, Ingeniería Eléctrica y Mecánica e Informática. El egresado podrá “promover, implementar y administrar el uso de energía limpia a partir de fuentes primarias de energía como son la energía solar, eólica e hidráulica, con una visión sustentable y eficiente”, plantea la propuesta.
Las tres carreras de ingeniería tienen una duración de cinco años y ofrecen títulos intermedios, de tecnólogo, a los dos y tres años. Silveira destacó que desde el diseño de las carreras predomina una visión transversal, lo que permite que si los estudiantes quieren cambiar de opción ese tránsito sea “lo más fácil posible”. Además, un gran componente del proceso de aprendizaje está basado en proyectos: “Es un desafío y es lo novedoso de la oferta de la Utec, que tanto estudiantes como docentes sean capaces de solucionar problemas con enfoques multidisciplinarios, aplicando conocimientos de distintas disciplinas”, explicó.
Amenazas
La sexta carrera nueva que se lanzará el próximo año es la de tecnólogo en Ingeniería Biomédica, que se dictará en el Instituto Tecnológico Regional de la Utec en Fray Bentos, que se inaugurará a fines de agosto. La propuesta recuerda que el Sistema Nacional Integrado de Salud “le ha dado al sector directrices claras que conllevan inversiones significativas, ocupación creciente y, por ende, una demanda de formación específica”, para lo que se buscará formar profesionales que puedan dar respuesta al aumento del parque de equipos biomédicos instalados. En caso que se recorte el presupuesto de la Utec previsto para 2017, esta sería la única carrera que podría peligrar, ya que el equipamiento requerido en la inversión inicial es muy costoso, afirmó el consejero.
Otro de los aspectos que se verían retrasados es la radicación de docentes de alta dedicación en el interior, “los que garantizan que la Utec tenga buen nivel y grupos de innovación, lo que permitiría el trabajo en territorio cerca de las empresas, para la solución de problemas”, afirmó Silveira. El proyecto de Rendición de Cuentas del Poder Ejecutivo eliminaba el incremento de 100 millones de pesos para la Utec en 2017, lo que implicaba 26% de su presupuesto actual. “Es un mazazo”, consideró Silveira. El artículo sustitutivo votado por la mayoría de los legisladores del FA en comisión contempla esa partida para la Utec, pero no está claro que estén los votos para que se apruebe.
La Utec comenzó su oferta educativa en 2014, con 42 estudiantes, y actualmente tiene 355 que cursan las seis carreras que están abiertas.