El sábado de tarde el presidente Tabaré Vázquez le traspasó el mando al vicepresidente Raúl Sendic y partió a Nueva York para participar en la 71a Asamblea General de las Naciones Unidas. Llegó ayer de mañana a una ciudad afectada por la explosión, en la noche del sábado, de una bomba que ocasionó más de 30 heridos en el centro de la ciudad. Vázquez hablará durante el debate general de la asamblea de mañana, a las 9.00 -hora uruguaya- que tiene como tema “Los objetivos de desarrollo sostenible: un impulso universal a transformar nuestro mundo”.

Pero antes del debate tendrá varias actividades. En la mañana de hoy Vázquez participará en un encuentro en la sede del Consejo de las Américas, una organización empresarial, en donde hará uso de la palabra y tendrá reuniones con representantes de empresas como Microsoft, CITI, CASA y AES. Luego comenzarán las reuniones bilaterales, que, según dijo Vázquez a TNU, serán “varias y bien importantes”. Primero tendrá una audiencia con el senador del estado de Nueva York Adriano Espaillat, un dominicano perteneciente al Partido Demócrata que pelea para ganar una banca en el Congreso en las elecciones de noviembre. Luego, sobre el mediodía, tendrá su primer encuentro con el presidente de Brasil, Michel Temer, en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

La reunión se confirmó después del impeachment que alejó a Dilma Rousseff del gobierno brasileño, hecho que el gobierno uruguayo calificó de “injusto”, aunque la administración de Vázquez prefirió no manifestarse sobre su legalidad. La audiencia se da en tiempos críticos a nivel institucional del Mercosur, después de que Brasil, Argentina y Paraguay se negaran a traspasar la presidencia pro témpore del bloque a Venezuela, y tras el reciente incidente entre ambos gobiernos, producido luego de que el canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, dijera en la Comisión de Asuntos Internacionales de Diputados que el canciller de Brasil, José Serra, pareció querer “comprar” el voto de Uruguay durante su última visita a Uruguay, cuando se discutía la presidencia del Mercosur. “Si se suspendía [el traspaso] nos iban a llevar en sus negociaciones con otros países”, había dicho el canciller en la comisión.

Pero el hecho parece haber quedado atrás. Nin Novoa dijo que se había tratado de un “malentendido” y, entrevistado días después en Chile, Serra dijo tener la certeza de que las relaciones con Uruguay “irán de la mejor forma”, y que la reunión de ambos presidentes será una oportunidad para “conversar, aclarar”. “Uruguay es un país con tradición democrática importante, y queremos analizar las cuestiones con ellos en un nivel elevado de mutuo entendimiento”, manifestó Serra.

Después del mediodía, Vázquez tendrá una reunión con la directora general de la Organización Mundial de la Salud, Margaret Chan, y de tarde participará en una celebración de la John Hopkins Bloomberg School of Public Health, que lo premió este año por su política antitabaco. Mañana, después de su oratoria en la Asamblea General de la ONU, tendrá una reunión con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Luis Alberto Moreno, y otra más tarde con el presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís.

La delegación uruguaya está compuesta, además de por Vázquez, por el canciller, el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, el representante de Uruguay en la ONU, Elbio Rosselli, el embajador uruguayo en Estados Unidos, Carlos Gianelli, y el embajador uruguayo en Cuba, Ariel Bergamino.