En los primeros días de esta semana el grupo Seu Pedro Bandera Lima, de la Unión de Trabajadores Azucareros de Artigas (UTAA), levantará el campamento que montó en marzo frente al Palacio Legislativo en reclamo de la adjudicación de la fracción 49 B de la Colonia Eduardo Acevedo, en Artigas, por parte del Instituto Nacional de Colonización (INC). “Estamos atrás de conseguir un camión”, dijo a la diaria Enrique Bandera, uno de los acampantes.

Si bien esa fracción de Bella Unión había sido ya adjudicada por el INC, el grupo Seu Pedro Bandera Lima la ocupó, por considerar que la adjudicación fue “poco clara e irregular” y porque se adjudicó “con ganado adentro” y la persona beneficiada “nunca se presentó en el predio”. Además, el grupo de trabajadores rurales presentó un “proyecto productivo” para desarrollar en la fracción, que consistía en una quinta, cría de aves de corral y cerdos, pesca artesanal (hay un arroyo), corte de leña e invernáculo de morrón. También, considerando que 150 hectáreas de la fracción son apropiadas para cultivar arroz, propusieron negociar “con los arroceros de la zona”, “pues en casi todas las fracciones de esa colonia se ha realizado este tipo de acuerdos”, que implican recibir una renta.

El martes 31 de mayo, los trabajadores de Bella Unión, apoyados por decenas de personas, ocuparon la sede del INC, ubicada en la calle Cerrito.

Como publicó la diaria, los ocupantes solicitaron ser recibidos por el directorio del INC, pero la autoridades del instituto se negaron a negociar con la sede ocupada. La Policía obligó a que se levantara la medida en el lugar, sin incidentes, y el directorio accedió a reunirse con el grupo.

En esa reunión el INC recordó que el 17 de mayo entregó al PIT- CNT una propuesta que implica que, por intermedio de la UTAA, los ocupantes reciban tierras en el formato de “módulo”. El viernes, el grupo aceptó la propuesta, pero cambió algunos nombres de las personas que integrarán el proyecto.

La presidenta del INC, Jacqueline Gómez, dijo a la diaria que “en la medida en que se levante el campamento, vamos a empezar con el proceso de implementación de la propuesta”. La presidenta del INC explicó que el proceso consiste en la entrega de la fracción que permanece ocupada, y “después la implementación de un acuerdo que tenemos con UTAA desde diciembre de 2015, que consiste en módulos de autoconsumo y venta de excedentes, que está en el entorno de las 15 hectáreas”. “Los módulos se adjudican al conjunto de las familias; es un emprendimiento colectivo que está pensado para una explotación ganadera con diversificación de rubros. La fracción en cuestión está como a 48 kilómetros de Bella Unión y a un kilómetro de la ruta”, explicó. Gómez destacó que se terminó implementando “después de 80 días lo que tenemos acordado con UTAA desde 2015 y la misma propuesta que hicimos el 5 de abril”.

Por su parte, Bandera consideró que la solución “no es un triunfo ni una derrota” y dijo que “los compañeros prácticamente aceptaron por el desgaste de tres meses”. “El proyecto nuestro era mucho más abarcativo, pero como el predio ya estaba destinado a otro, aceptamos”, concluyó.