La Corte de Apelación de Gante, Bélgica, examinó el martes un recurso presentado en setiembre por la fiscalía de Flandes Oriental contra la resolución que, en primera instancia, había desestimado la entrega a España del rapero mallorquín Josep Miquel Arenas, conocido como Valtònyc, sobre el que pesa una orden europea de extradición. El artista fue condenado a tres años y medio de cárcel en su país por delitos de “enaltecimiento del terrorismo”, “injurias a la Corona” y “amenazas”, debido al contenido de las letras de varias canciones de su autoría que difundió por internet.

La Corte decidió que recién el 6 de noviembre fijará posición sobre la situación del rapero, pero, según La Vanguardia, esa resolución podría no ser la última, porque ya sea que se pronuncie a favor de su extradición o reafirme la decisión de primera instancia, que la desestimaba, tanto la fiscalía belga como la defensa de Valtònyc podrán presentar un recurso de casación. En ese caso, el expediente pasaría de Gante a Bruselas, en donde se adoptará la decisión definitiva.

Por otro lado, el actor español Willy Toledo enfrenta un pedido de procesamiento tras una denuncia de la Asociación de Abogados Cristianos, que lo acusa de haber publicado en Facebook “frases potencialmente ofensivas para la religión católica y sus practicantes”.

La publicación fue en julio del año pasado, cuando el actor se refirió a una jueza de Sevilla como “energúmena” por haberle abierto un juicio oral a tres mujeres que realizaron lo que llamaron “la procesión del coño insumiso”. “Yo me cago en Dios y me sobra mierda para cagarme en el dogma de la santidad y virginidad de la Virgen María. Este país es una vergüenza insoportable. Me puede el asco. Iros a la mierda. Viva el coño insumiso”, agregó Toledo en esa oportunidad en su muro de Facebook. El abogado del actor señaló en un escrito que el hecho de que pueda abrirse juicio contra su defendido “implica clara y rotundamente que en este país se está criminalizando la libertad de expresión, y lo que es más grave, la libertad de pensamiento”.

Toledo, recuerda Efe, ha sido en los últimos años protagonista de numerosas polémicas, al acusar a la Policía española de torturar a los detenidos; hacer una huelga de hambre por la expulsión de una mujer marroquí a su país; llamar “delincuente común” al fallecido disidente político cubano Orlando Zapata o irrumpir en el Congreso de los Diputados con gritos a favor de la libertad del Sahara.