Todo parecía indicar que la Cámara de Diputados iba a aprobar ayer la ley de financiamiento de partidos políticos, que establecía, entre otras cosas, que solamente podrían hacer donaciones las personas físicas, dejando de lado a las jurídicas. Pero el proyecto finalmente fracasó debido a la negativa a votarlo del diputado oficialista Darío Pérez. “Está claro que el compañero Pérez quedó dolido porque el Plenario [del Frente Amplio] lo sancionó por cuatro meses. Él quería que fuera mayor, porque una sanción así no contribuye para nada a su imagen de rebelde. Más bien lo contrario, porque es un chaschás en la colita. Yo creo que con esta negativa lo que busca es que lo sancionen por lo menos por un año, algo que incluso le daría una excusa para irse al Partido Nacional”, declaró un diputado oficialista.

Tras el naufragio del proyecto de ley, varios empresarios interesados en colaborar económicamente con partidos políticos para que los favorezcan si llegan al gobierno manifestaron su descontento. “Primero reciben nuestro dinero. Después dicen que no lo quieren. Ahora parece que de nuevo lo quieren. Que se decidan de una buena vez, porque por estas fechas es cuando decido mis inversiones para el año que viene, y tengo que saber si voy a poder invertir en candidatos a cambio de favores o, por el contrario, busco otro tipo de influencias, en el Poder Judicial, por ejemplo”, declaró el propietario de Buquebus, Juan Carlos López Mena.