Hace algunos días el presidente de la Junta Departamental de Tacuarembó, Felipe Bruno, aseguró mientras hablaba sobre el gobierno: “No sé si no va a tener que venir otra dictadura para que estos sabandijas se terminen”. El Honorable Directorio del Partido Nacional le llamó la atención a Bruno, quien envió una carta al organismo aclarando lo que intentó decir: “Solamente una fuerza superior como la de un gobierno de facto podría poner freno a esta corrupción”. Un dirigente nacionalista explicó que “luego de la carta no le llamamos la atención de nuevo porque si seguía aclarando, iba a terminar pidiendo que los tanques se instalaran en las afueras del Palacio Legislativo”. En ámbitos castrenses las palabras de Bruno generaron desconcierto. “Este discurso ambiguo de los civiles de derecha sobre si los militares tienen que sacar a la izquierda del poder nos tiene inquietos. Unos dicen que sí, otros que de ninguna manera, otros dicen que no pero sin mucha convicción. Yo estoy abierto a todas las posibilidades, pero lo único que les pido es que se definan, así sé si puedo ponerme en cuotas o no”, declaró un general de las Fuerzas Armadas. El oficial explicó que “si bien hoy en día tenemos beneficios económicos, con una dictadura nos iría mucho mejor, porque se nos permite robar abiertamente. Pero ¿qué pasa si me compro un campo con un crédito porque estoy seguro de que vamos a volver, pero después resulta que nos tenemos que quedar en los cuarteles? Necesitamos certezas”.