Se huele en el aire que comienza el año electoral: todavía no terminó enero y algunos precandidatos ya retomaron al firme su recorrida por aquí y por allá a puro acto. En el Partido Colorado (PC), por ejemplo, es el caso del economista Ernesto Talvi, líder de Ciudadanos, que lleva adelante la gira “Pueblo a pueblo”, que mañana aterrizará en Piriápolis para seguir dando a conocer su proyecto y su figura política.

El sábado Talvi estuvo en el balneario Costa Azul, de Canelones, en donde prometió que si llega a ser presidente eliminará “gradual y responsablemente” el Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social (IASS), ya que le parece una “injusticia” que “le vuelvan a cobrar impuestos” a una persona después de que se jubiló y “ya pagó sus impuestos”. Subrayó que el IASS es un impuesto que “no debería existir”. “Digo ‘gradual y responsablemente’ porque si yo le prometo a usted que el 1º de marzo lo vamos a eliminar, le estoy mintiendo, porque con el IASS se recauda mucho dinero y, lamentablemente, no nos podemos dar el lujo [de eliminarlo de entrada]. Entonces, es un impuesto injusto que hay que apuntar a eliminar. Hay que hacerlo por ley y se va a poder hacer de manera paulatina y gradual”, insistió. Además, prometió que “no va a haber ni un solo jubilado pobre en Uruguay si gobierna Ciudadanos”.

Otro de los temas en el que Talvi puso mucho énfasis es la situación política de Venezuela. En contacto con la diaria, el precandidato sostuvo que el diálogo que plantean el gobierno de Uruguay y el Frente Amplio, como todo diálogo, “requiere de dos partes negociando de buena fe”. “Pero aquí, de un lado, hay una dictadura criminal que tiene el control absoluto de los medios de represión del Estado y los usa contra la población civil, y que ha mostrado en el pasado, todas las veces que se inició un diálogo, no tener la más mínima voluntad de democratizar Venezuela. Cada vez que quiso un diálogo fue para comprar tiempo para recuperar el oxígeno cuando se vio acorralada”, agregó. Por lo tanto, el precandidato considera que el planteo de diálogo hecho por el gobierno, dados “los antecedentes de la dictadura de [Nicolás] Maduro, carece de seriedad”. Según Talvi, para que esto sucediera debería haber “condiciones previas” que muestren “la buena fe del régimen de Maduro”, como “liberar a los presos políticos” o “terminar con la represión y la muerte en las calles”. Pero “nada de eso sucedió”, sentenció.

“La verdadera opción no es entre el diálogo y la violencia, como se plantea, sino entre el diálogo y la presión internacional para que se haga una convocatoria a elecciones libres, con todas las garantías, en un plazo más o menos inmediato. Mientras tanto, hay que reconocer al presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela [Juan Guaidó] como presidente interino y como responsable de hacer ese llamado a elecciones, que es la posición que han tomado la mayor parte de los países de América Latina, Estados Unidos y Canadá, y los principales países de Europa”, dijo Talvi. Por último, señaló que tener la misma postura que países como Siria, Irán, Nicaragua, Cuba, China y Rusia deja a Uruguay “del lado equivocado de la ecuación”.

Calentando motores

En cambio, los otros dos grandes sectores del PC vuelven al ruedo a ritmo más lento. En el caso de Batllistas, su líder no tiene que hacerse conocer, ya que es el ex presidente Julio María Sanguinetti. El diputado Tabaré Viera, cabeza de la agrupación Espacio Abierto –riñón de Batllistas y principal impulsor de la vuelta de Sanguinetti–, dijo a la diaria que recién esta semana se reunirán para programar la agenda de febrero. El sector empezará por Rocha, ya que fue el único departamento que les quedó pendiente visitar con Sanguinetti. Luego se enfocará en Montevideo y Canelones. Viera señaló, como se viene repitiendo desde hace tiempo en el sector sanguinettista, que a fines de febrero y principios de marzo definirán quién será su candidato. Como se sabe, todas las fichas están puestas al ex presidente y el propio Viera admitió que no se maneja un plan B en caso de que, por esas verdades del destino, se llegue a negar. Por ahora los dirigentes de Batllistas no han vuelto tocar el tema al hablar con Sanguinetti ya que, según Viera, “la peor manera de convencerlo es embromarlo mucho”.

Por último, el senador colorado José Amorín Batlle, líder y precandidato de Uruguay Batllista, dijo a la diaria que el sábado 16 de febrero su sector llevará a cabo un encuentro nacional en Canelones, y después no parará de hacer campaña.