El intendente de Montevideo, Christian Di Candia, firmó un decreto con el que pretende mejorar la accesibilidad y el confort en los ómnibus capitalinos. Varios medios de prensa divulgaron ayer que según la norma, todas las unidades nuevas deberán tener piso bajo y aire acondicionado, pero desde la Intendencia de Montevideo (IM) aclararon que el decreto es “bastante más específico”. “Con tener el piso bajo no alcanza. El piso además tiene que estar sucio, como ocurre desde siempre con el resto de los ómnibus. Si lo que queremos es que haya una inclusión real, las unidades adaptadas para las personas con discapacidad tienen que ser iguales a las demás”, explicó un jerarca de la IM.

Con respecto al aire acondicionado, el funcionario también aclaró que “la norma no se refiere a que tiene que haber ambiente climatizado, sino a que la unidad debe contar con un equipo de aire acondicionado que, si estuviera funcionando, serviría para enfriar el ambiente. Pero la idea es que esté siempre roto”.

Otro de los requisitos para las nuevas unidades es que funcionen con energías renovables. En este caso las autoridades no establecieron ningún requisito adicional, ya que, según explicó el jerarca consultado, “los propios fabricantes de sistemas de energías renovables se encargan de que el cambio en la matriz energética termine siendo solamente una especie de cambio cosmético y el mundo siga siendo una mierda”.