Buenos días. Les comento algunas noticias de la campaña electoral que pueden leer hoy en la diaria.

Tras el anochecer de un día electoral agitado, ayer comenzaron las interpretaciones y la construcción de relatos.

Desde los partidos cuyos dirigentes apoyaron a Luis Lacalle Pou, se expresó total confianza en que este será el vencedor, con indudable apoyo en la aritmética, y se reiteraron las críticas a Daniel Martínez por no haberse declarado perdedor al final de la jornada de anteayer.

A su vez, Martínez sostuvo en Twitter que “lo correcto es esperar los resultados de la Corte Electoral”, y adelantó que va a ir personalmente a saludar a Lacalle Pou cuando se confirme su victoria. El presidente del Frente Amplio (FA), Javier Miranda, consideró “formidable” la votación por Martínez, y aseguró que el actual oficialismo está dispuesto a ser “una oposición responsable, seria y constructiva”. También afirmó que más adelante vendrá el momento de la autocrítica.

Lo indudable es que, con independencia de los errores que cometió el oficialismo en la campaña y previamente, sus militantes aportaron este mes al logro de resultados impresionantes, que sumaron casi 190.000 votos, con crecimientos porcentuales destacados en Rivera, Salto, Durazno, Soriano y Cerro Largo. Según el análisis de nuestras muestras para las proyecciones de escrutinio, el FA también le “quitó” muchos votos a Cabildo Abierto (CA) y al Partido Colorado.

Dos politólogos consultados por la diaria destacaron que el escenario en el que gobernará Lacalle Pou, requerirá un delicado equilibrio entre la conducción de su “coalición multicolor” y las relaciones con la oposición política, fortalecida por la remontada de Martínez. También hubo referencias a los problemas que puede traerle la sociedad con CA, a la luz del mensaje que Guido Manini Ríos dirigió a los integrantes de las Fuerzas Armadas para exhortarlos a que no votaran por Martínez. Sobre los resultados que logró el candidato del Frente Amplio, ambos consideraron que entre sus principales causas estuvieron ese mensaje de Manini, la eficacia de la campaña Voto a Voto y la llegada de votantes desde el exterior.

Ayer el colorado Ernesto Talvi dijo que no estaba de acuerdo con lo hecho por Manini, pero consideró que esto muestra sólo “un matiz” en el marco de la futura coalición de gobierno. En la misma línea, Pablo Mieres, líder del Partido Independiente, dijo que no comparte el mensaje pero que el ex comandante en jefe del Ejército y su partido “tienen todo el derecho de decir o hacer lo que les parezca”.

Mientras tanto, la mayoría de las encuestadoras atribuyó la diferencia entre sus mediciones previas al balotaje y los resultados del domingo a cambios de último momento, sin considerar la posibilidad de que hubieran cometido errores. Quizá esto nos ayude a pensar en las complicaciones derivadas de que quienes se ocupan de registrar la opinión pública e informar al respecto también tengan intereses comerciales propios en la venta de servicios (que requieren, entre otras cosas, prestigio), y además se desempeñen como analistas políticos. Estamos acostumbrados a que las mismas personas hagan todo eso a la vez, pero quizá no sea lo más conveniente.

Hasta mañana.