Tras el retiro de las propuestas que formaban parte de la reforma constitucional Vivir sin miedo y la marcha atrás en la creación de direcciones unipersonales para los Consejos de Primaria, Secundaria y Utu, finalmente fue firmado el acuerdo de la oposición para una futura coalición de gobierno. Varios líderes opositores dijeron estar “más tranquilos” firmando la nueva versión del acuerdo. Desde el Partido Nacional aclararon de todos modos que estos puntos no fueron eliminados, sino que fueron pasados “a esa letra diminuta que se pone al final de cualquier contrato y que nadie lee”. Un legislador nacionalista explicó que de esta manera “desde el futuro gobierno se puede argumentar que los puntos polémicos estaban incluidos en el acuerdo y por eso se pusieron en práctica, y los líderes de los otros partidos pueden defenderse afirmando que no los leyeron porque pensaron que eran una mera formalidad, algo así como lo que pasa con los términos y condiciones de las aplicaciones del celular”.

El senador del Partido Independiente Pablo Mieres reconoció que algunas de las propuestas del acuerdo inicial lo impresionaban“muy negativamente”, cosa que no ocurrió cuando fueron pasadas a letra chica. “Si en ese mamotreto de texto que uno solamente podría haber leído si tuviera montones de tiempo libre y un microscopio electrónico hay una propuesta de Guido Manini Ríos para establecer el servicio militar obligatorio, la culpa no va a ser mía”, declaró el legislador.