Una y otra vez sonó ayer, en un coqueto bar de Pocitos, el nuevo jingle de campaña del precandidato Jorge Larrañaga, del Partido Nacional (PN): “Sin miedo va, Larrañaga va”. Un par de cientos de personas se congregaron, en la esquina de Avenida Brasil y Juan Benito Blanco, para presenciar el acto en el que el orador principal fue el líder del sector Alianza Nacional. En los minutos previos, una señora con el pelo encanecido repartió unos volantes invitando a un acto por el 8 de marzo. “Día internacional de la mujer femenina. Mostramos nuestra belleza sin exhibicionismo”, decía el mensaje, que estaba acompañado por la silueta de una mujer rodeada de flores. El lugar del encuentro es la sede de Nosotros Vamos Juntos, una agrupación que integra la lista 66 del diputado Pablo Abdala, quien aclaró a la diaria que Larrañaga no estaba al corriente de la convocatoria a esa movilización, y que él mismo no comparte totalmente el concepto que maneja ese grupo, pero que en todo caso la idea no es hacer un acto que se contraponga a la marcha del 8 de marzo.

Preocupados por las internas

En rueda de prensa, Larrañaga pronosticó que en las elecciones internas de este año habrá más votantes que en las anteriores (en las que sufragaron 976.655 personas, la menor cantidad desde que comenzaron a realizarse en 1999), debido a “la polarización” en los partidos. “El gran defecto de la interna es que es voluntaria, fue un gran error que cometimos en la reforma constitucional de 1996”, opinó.

Acerca del mismo tema, ayer los diputados Abdala y Jorge Gandini (Por la Patria) instaron a los ciudadanos a expresarse en las urnas, destacando que se trata de la primera etapa para elegir al próximo presidente. “El que se quede en la casa estará regalando esa decisión a otros. El que no tome partido estará hipotecando su propio futuro”, dijo Gandini. Por su parte, Abdala afirmó: “Todo está para ganar, pero que ganemos no depende sólo de los errores del adversario [...]. Los blancos tenemos que hacer opciones inteligentes que faciliten el cambio político en Uruguay”.

La parte más aplaudida del discurso de Larrañaga fue su afirmación de que el Frente Amplio (FA) “no se imagina la lucha que vamos a desplegar”, reivindicando que la recolección de firmas para la campaña Vivir sin Miedo logró “lo que ningún partido tradicional en la historia de este país ha logrado: que un sector sin ayuda del PIT-CNT ni de organizaciones sociales, sin un peso, sin banderas”, obligue a “discutir sobre la seguridad”.

“¿Qué dicen el señor [Daniel] Martínez y la señora [Carolina] Cosse y los otros candidatos del FA? Porque no me van a decir que van a venir a combatir la inseguridad con comisiones interinstitucionales o gabinetes multisectoriales”, ironizó el precandidato, y sostuvo que las políticas de seguridad del FA son “conservadoras” y también “de probeta”, porque “están en los laboratorios, pero no están en la vida real de los uruguayos”.

En otro pasaje, el senador se refirió a las “resistencias sindicales” y expresó su discrepancia con los sindicatos de las empresas Colgate y Fleischmann, porque “en nombre del trabajo paran”. “¿Qué forma es esa de defender el trabajo?”, preguntó.

También comentó que “en una escuela de Atlántida” se puso en la cartelera gremial “publicidad en contra de nuestra campaña” (Vivir sin Miedo). “Vamos a ver si nos dejan poner nuestra publicidad ahí, no lo haríamos porque no estamos para andar pisoteando las instituciones de la laicidad”, afirmó.