El viernes un hombre en situación de calle de 67 años falleció por hipotermia en Pando; fue la segunda persona que murió de frío en lo que va del año. La primera había sido un cuidacoches que fue encontrado el jueves en La Blanqueada, en Montevideo.

A raíz de del segundo fallecimiento, la Intendencia de Canelones (IC) decidió recurrir a la Ley de Faltas (19.120) para llevar a los refugios a las personas incluso en contra de su voluntad, pero la Justicia no hizo lugar al pedido. Gabriela Garrido, directora general de Desarrollo Humano de la IC, dijo a la diaria que la comuna y el Ministerio del Interior propusieron a los juzgados de paz de Pando y Las Piedras aplicar la Ley 19.120, pero “lamentablemente, en ambos casos, la Justicia de las localidades resolvió que no se aplicaría, a no ser que existiera riesgo de vida contestable por un médico”, comentó.

Garrido dijo que en las recorridas nocturnas realizadas en los últimos días encontraron personas que, si bien no corrían un riesgo inminente, “el frío tan intenso podía hacer peligrar su vida en cualquier momento de la madrugada”. Lo que hizo la IC durante la madrugada del domingo fue recorrer las localidades para intentar convencer a las personas en situación de calle de que fueran a un refugio. “Quedaron personas que decidieron quedarse, y nosotros no teníamos forma de llevarlas en contra de su voluntad”, dijo. La jerarca aseguró que el equipo social de la IC está trabajando en Las Piedras porque es la localidad con más personas en situación de calle (44). En Pando son 12 las personas que están en esta situación.

Garrido anunció que en los próximos días la IC y el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) abrirán en Las Piedras un residencial para personas en situación de calle y un centro de atención para personas con adicciones. “Será un lugar al que las personas podrán concurrir con perros y donde habrá proyectos de carácter cultural y laboral”, comentó.

Como el residencial todavía no está funcionando, ante la ola de frío la IC abrió un refugio temporal en Las Piedras, en el que ayer había 20 personas. El viernes, uno de los días en que el frío fue más intenso, en todo el departamento había 29 personas durmiendo en la calle, ya que al refugio temporal ese día fueron sólo 12 personas y otras 15 aseguraron que habían conseguido refugio en casas de amigos o familiares. Durante la ola de frío de la semana pasada, el Instituto Uruguayo de Meteorología pronosticó una temperatura mínima de tres grados bajo cero en el sur del país. La funcionaria destacó que en las recorridas no se encontraron niños viviendo en la calle.

Con respecto a la resolución de la Justicia, Garrido dijo que hay que revisar la normativa legal o que, en su defecto, “la Justicia tiene que hacer mejor uso de ella”. “Estamos trabajando para proteger a estas personas. No estamos yendo contra el derecho de elegir dónde vivir, sino que las estamos protegiendo. Es un tema de protección de la vida”, afirmó.

Por su parte, Raúl Oxandabarat, vocero del Poder Judicial, dijo a la diaria que la aplicación de la Ley de Faltas parte de una solicitud que tiene que hacer la administración y que afecta “el derecho a la libertad de la persona”, por lo que es necesario que sea un juez el que haga lugar al pedido.

El sábado el colectivo Ni Todo Está Perdido (Nitep), integrado por personas en situación de calle, emitió un comunicado en el que aseguró que “las víctimas del frío son víctimas de la indiferencia y la negligencia de un sistema injusto, que no protege de igual forma a la ciudadanía, y el Estado es el principal responsable”. Nitep repudió “los intentos de usar a los compañeros en situación de calle muertos como tema de campaña electoral, en busca de que reditúe en votos”. El colectivo agregó que “repudia todo intento de internación compulsiva y propone el diálogo con las personas”, así como “la apertura de nuevos dispositivos que contemplen las distintas situaciones y sus particularidades. ¡Somos personas, no objetos que pueden mover de un lugar a otro!”. Sobre la aplicación de la Ley de Faltas, sostuvo que “es una forma encubierta de criminalización de la pobreza y de su ocultamiento, buscando invisibilizar a las personas y no hacerse cargo efectiva y realmente de las situaciones de vulnerabilidad a la que se empuja a las personas”.

Hoy el diputado del Partido Nacional Pablo Abdala pedirá que la ministra de Desarrollo Social, Marina Arismendi, asista al Parlamento para hablar de las muertes por hipotermia. En conversación con la diaria, dijo que el Mides está omiso porque “debió haber tomado medidas para evitar estas muertes”. Sostuvo que el ministerio puede implementar la Ley 18.787, que dice que las personas “en situación de intemperie completa, con riesgo de graves enfermedades o incluso con riesgo de muerte, podrán ser llevadas a refugios u otros lugares donde puedan ser adecuadamente asistidas, aun sin que presten su consentimiento, siempre que un médico acredite por escrito la existencia de alguno de los riesgos [...] sin que ello implique la privación correccional de su libertad”. Abdala recordó que en 2017 hubo una “discusión” con la ministra, pero “la temperatura no fue tan baja y no tuvimos que lamentar la pérdida de una vida”. “Ahora, frente a esta realidad, las cosas cambian”, sostuvo.

En 2011, tras una ola de frío durante la que también murieron personas, la por entonces ministra de Desarrollo Social, Ana Vignoli, fue removida del cargo por el presidente José Mujica.