Las tres tienen en común que son cooperativas, pero además comparten otras particularidades innovadoras en el sector: están conformadas por grupos de personas donde la mayor tiene 43 años de edad, y por otro lado apuestan a rubros de alto contenido tecnológico –como el audiovisual y la radio–, en los que el cooperativismo uruguayo viene rezagado respecto de otras modalidades de empresa. También coinciden en que atravesaron –o lo están haciendo– el proceso de incubación de la primera incubadora de cooperativas del país, incubacoop.

Radio Pedal

Comenzó trabajando en una habitación de tres por cuatro metros en el Centro de Montevideo. Corría 2015 y Radio Pedal era un colectivo de 50 personas que decidía armar una radio para sintonizar por internet con el propósito de hacer un medio de comunicación alternativo. La receta incluía, además de los programas, una parte editorial que produce contenido escrito, fotográfico y audiovisual, focalizados en «temas de nuestro interés», sostiene Paola Melgar, integrante de la cooperativa en formación, y ejemplifica: «Derechos humanos, recuperación del pasado reciente, igualdad de género, cultura». «Tocar temas que no están bajo la órbita de ninguna agenda y dar voz a quienes no tienen el espacio», complementa.

En 2017 surgió la posibilidad de presentarse al segundo llamado a incubación de INCUBACOOP, y en febrero comenzaron el trayecto con tutores, «organizándonos en lo administrativo, sobre los fines y la forma de trabajo», cuenta Melgar. En los hechos, Radio Pedal ya se constituía con un funcionamiento muy similar al de las cooperativas: con asambleas generales una vez al mes y el trabajo autónomo de comisiones. Eso pesó también para inclinarse por este proceso.

Con el crecimiento del proyecto, vino también la necesidad de infraestructura. Desde el 10 de junio de este año se encuentran en un espacio de trabajo colaborativo de 300 metros cuadrados, en Palermo, que comparten con otros colectivos: Boniato y Catalejo. «Una transformación radical –resume Melgar–: de convivir, de hacer, de mostrarnos y trabajar en un barrio, algo que antes no lo teníamos tan presente por no tener un espacio propio».

«No hay un patrón, sino que somos un grupo muy variopinto», responde, consultada por el colectivo: «Un grupo de personas de 20 a 43 años de edad, con una media de 30, que venimos de diferentes palos –contadores, psicólogos, docentes...– y eso es muy rico para el perfil del colectivo», resume. Para Melgar, un debe de la radio es el interior del país: «Cubrimos, sobre todo, Montevideo».

De 50 integrantes de la radio, 17 son cooperativistas. Melgar considera que el funcionamiento ahora es «un poco más complejo», porque «queremos seguir manteniendo la horizontalidad entre los que estamos en la cooperativa y los trabajadores, pero hay decisiones a tomar desde la cooperativa». La conformación de la cooperativa está en proceso; se estima que para principios de agosto el trámite esté finalizado. Por otro lado, Melgar siente que el aporte más significativo del modelo cooperativista es en lo legal: «No teníamos una responsabilidad tan asumida y ahora tenemos que responder a ciertos organismos estatales; por otro lado, nos da la seguridad de poder posicionarnos como alguien que existe. Creo que ganamos en estabilidad».

Intergalactic

Andrés Roél y Leandro Santamaría se conocieron estudiando audiovisual en la utu del Laboratorio Tecnológico del Uruguay, en 2014, y al recibirse decidieron formar una productora audiovisual; se juntaron con otros tres amigos que habían estudiado ingeniería audiovisual y bachillerato en audiovisual, invirtieron en equipos de manera equitativa y comenzaron a trabajar. Así surgió Intergalactic, una realizadora de piezas audiovisuales: videos institucionales, corporativos, publicidad, videoclips, documentales y cortometrajes.

Estos cinco treintañeros llegaron al cooperativismo buscando una figura jurídica –«era la que más nos calzaba», sostiene Santamaría–. Casi al mismo tiempo abrió INCUBACOOP y se lanzó el primer llamado a ideas, al que se presentaron y quedan seleccionados. «Ya entrar ahí nos ordenó como grupo. Teníamos conocimiento en audiovisual pero ninguno estaba capacitado para llevar un negocio adelante», afirma Santamaría, quien lo que más valora del cooperativismo es la horizontalidad. «Te lleva al diálogo para resolver las cosas y eso te potencia el crecimiento humano. Es madurar y crecer como persona», explica.

La cooperativa en sí se estableció en octubre de 2017. El mayor cambio a nivel operativo, para Santamaría, fue la capacidad de respuesta comercial y de marketing. «Antes hacíamos el laburo que llegaba; hoy lo salimos a buscar», ejemplifica.

Intergalactic funciona en Enlace, el espacio de trabajo colaborativo de la Intendencia de Montevideo, que les ayudó a generar vínculos con y entre el cooperativismo. «Hemos trabajado con algunas cooperativas», cuenta Santamaría, al tiempo que opina que «entre cooperativas hay una empatía más fácil a la hora de trabajar. La idea es profundizar este vínculo con acciones».

Feedback

Feedback, en sus inicios, fue pensada como una plataforma de contenidos interactivos de entre dos y ocho minutos, pero con el tiempo se fue transformando. Actualmente el colectivo está conformado por siete personas de entre 26 y 42 años de edad, de distintas áreas: producción de contenidos, publicidad, audiovisual, diseño gráfico y sistemas; «la mayoría nos conocíamos de antes, éramos compañeros de otros trabajos o amigos de facultad», cuenta José García. «Nos fuimos conectando. Había ganas de hacer cosas en común, desarrollarse en lo audiovisual y ofrecer algo que se salga del molde», agrega.

Hoy trabajan sobre tres líneas de productos: audiovisuales interactivos, en los que puede haber un personaje que hace preguntas y el juego va tomando diferentes caminos según la respuesta del que juega; contenidos audiovisuales habituales –como spots publicitarios–; y el manejo de redes sociales para empresas en el marco del diseño de una estrategia digital.

Si bien ya funcionaban como una cooperativa, el llamado de INCUBACOOP a fines de 2017 fue el paso que necesitaban para adentrarse en este modelo. Lo más valioso para García es que «todos somos dueños de nuestro propio trabajo, de nuestra propia empresa, y uno le pone más amor porque está trabajando para uno». Dice no saber si les «cambió algo ser parte de una cooperativa, pero sí sé que no cualquiera puede ser una cooperativa. Hay que tener ciertas características humanas», opina.

Feedback se reúne semanalmente en Enlace, en el cruce de las calles Agraciada y San Martín, donde comparten con los integrantes de Intergalactic, con quienes apuestan a llevar a cabo algún proyecto juntos. Por otro lado, visualizan que a nivel de comunicación hay una «gran» necesidad en el cooperativismo, por lo que por ese lado apuestan a expandir la intercooperación.