Arranca el festival Llegando a Montevideo, en la sala Zitarrosa, con artistas para todos los gustos

El viernes en la sala Zitarrosa empieza la séptima edición del festival Llegando a Montevideo, que contará con variadas propuestas musicales de Iberoamérica. El músico Jorge Schellemberg, director de la sala, contó a la diaria que el evento surgió en 2013, en el marco de Montevideo Capital Iberoaméricana de la Cultura, de la mano de la Asociación para el Desarrollo de la Industria de la Música Iberoamericana, que promueve este tipo de festivales colectivos. Shellemberg explicó que desde la primera edición decidieron sostener el concepto de conformar la grilla con artistas que ya tienen “un recorrido interesante” en sus países, pero que, por diferentes motivos, todavía no llegaron a Montevideo, o, si lo hicieron, “no tienen el recorrido que se merecen y todavía su música no es muy conocida”.

“La selección se hace en base a un criterio de calidad y de diversidad. Además, como sala pública, se busca la posibilidad de generar un puente cultural con otras músicas. Siempre han participado músicos uruguayos y la idea también es generar un intercambio bonito. Desde que arrancó es un festival con entrada gratuita y que se hace en base a un esfuerzo mancomunado tanto de los artistas como de la sala”, contó Schellemberg. El jerarca explicó que el festival se sustenta gracias a que los artistas internacionales llegan por sus propios medios –la sala no les paga los pasajes–, además de que se consiguen diversos apoyos y la sala tiene una cuenta extrapresupuestal, que es a donde va el provento, el 30% que les queda cuando realizan coproducciones.

“Tenemos buenos acuerdos de hotelería, también se les da alimentación y un cachet modesto, que en general es bastante menos de lo que cualquiera de estos artistas cobran en sus países de origen, pero tienen un interés especial en llegar a Uruguay porque el festival, después de siete años, tiene prestigio: es tocar en una sala bonita, patrimonial, que se llama Zitarrosa y que está en el centro de la ciudad. Además, llegan a un país que si bien es pequeño, puede ser un lugar para continuar viniendo. De hecho, ha habido artistas que llegaron a través de este festival por primera vez y que después repitieron en condiciones diferentes, ya con venta de entradas”, dijo Schellemberg.

La grilla

Como no todo es música, el festival arrancará el viernes a las 17.00 con la proyección del cortometraje Los cielos de Zha (Uruguay, 2018), dirigido por Juan Martín Xavier y Pedro Cayota. Es un documental que trata sobre Zha, una niña que “pasa el día iluminada por los tubos de luz del almacén de sus padres” y “solamente ve el cielo en la escuela, ese lugar donde descubre la amistad”, según describía la gacetilla de Cinemateca. Entrando en la música, el viernes abrirá la portuguesa Beatriz Nunes, que desde 2012 integra Madredeus, a la que Schellemberg describe como una banda “mítica”. Luego seguirá la chilena Camila Vaccaro, que mezcla músicas nativas latinoamericanas con sonidos procesados. Por último, la primera jornada la cerrará nuestro Edú Pitufo Lombardo, que no necesita presentación.

El sábado, también a las 20.00, arrancará la segunda fecha con la argentina Mariana Baraj, que mezcla folclore con pop. Tocará canciones de su último disco, Vallista, y repasará lo mejor de su carrera. Luego se presentará el español Andrés Molina, junto a Rebeca Píriz, quienes darán vida al espectáculo “Los hombres que bebieron con Dylan Thomas”. Después estará Leo Minax, de Brasil, con su disco más reciente, Trinta, que tocará junto a los uruguayos Martín Ibarburu (batería), Claudio Vignone (bajo) y el argentino German Kucich (piano). Esa fecha la cerrará Convergencia Trío (Cuba-Uruguay), que brindará un espectáculo que “aborda la música cubana desde varias aristas, tratando de adaptar este lenguaje a un formato pequeño, lo cual implica todo un desafío sonoro”. “Desde ritmos como el bolero, el son, la trova, hasta sonoridades también de estos tiempos, buscando a la vez un aire fresco, pero manteniendo siempre la tradición”, se publicita en la gacetilla de prensa.

El festival se cerrará el domingo, también a partir de las 20.00, con la proyección del documental brasileño Indios no poder, dirigido por Rodrigo Arajeju. Luego hará de las suyas la cantautora y flautista venezolana Yaxza Lara, con las canciones de su disco Camino, inspiradas en ritmos y melodías afrovenezolanas, brasileñas y bolivianas. Los ritmos latinoamericanos también estarán presentes en la música de Germán Pinzón, de Panamá. Por último, marcará presencia la uruguaya Papina de Palma, con su disco debut, Instantes decisivos (2016), más canciones nuevas que integrarán su próximo álbum. “Este es un año muy fuerte, porque, además, son los 20 años de la sala Zitarrosa; entonces, pusimos mucho tiempo para planificar este concierto”, finalizó Schellemberg.

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