El candidato del Partido Colorado, Ernesto Talvi, participó ayer en uno de los tradicionales almuerzos que organiza la Asociación de Dirigentes de Marketing, en el hotel Radisson, y redobló la apuesta con el tema que puso sobre el tapete la semana pasada: la cantidad de empleados públicos que ingresaron durante los gobiernos del Frente Amplio (FA). A manera de preludio, Talvi se refirió al “espejismo” o “la década mentirosa”, en referencia al período 2004-2013, cuando el país creció “de manera formidable”, 6% por año, “mucho más que el promedio histórico”, que se generó “por fuerzas externas que no controlamos”, como los precios de los productos agropecuarios que Uruguay produce y vende. “A partir de 2014, el país se estancó, creció muy poco. Tuvimos crecimiento con destrucción de empleo y sin inversión, que no es una forma sana de crecimiento. Al FA hace cinco años que se le terminó el espejismo, tiene que vivir administrando la escasez y no sabe hacerlo”, aseguró.

Talvi recordó que el déficit fiscal es de 4,9% del Producto Interno Bruto, que equivale a 2.500 millones de dólares por año. Agregó que entre 2005 y 2014, en la época de “bonanza, cuando sobraban los recursos”, ingresaron “70.000 nuevos funcionarios” al Estado, y así se llegó al récord actual de “312.000 empleados públicos”. “Esos 70.000 que ingresaron a la administración pública hoy le implican al país gastos de 1.700 millones de dólares por año, que no tenemos los recursos genuinos para financiar, y que, por ende, tenemos que financiar a punta de endeudamiento, comprometiendo el buen crédito del país y la solvencia financiera del Estado”, subrayó. Además, Talvi aseguró que “de no haber ocurrido ese aumento histórico” en el número de funcionarios púbicos, “hoy el país tendría un déficit fiscal de 1,8%”, que es un número “cómodo y manejable”.

El candidato dijo que la pregunta “que nos tenemos que hacer todos” es si era “necesario” ese aumento “tan extraordinario” del tamaño del Estado, y que la respuesta es “categóricamente no”. Más adelante, “para que no quede en el abstracto” y para explicar por qué lo afirma con “tanta convicción”, Talvi lo ejemplificó con el área de la educación. Sostuvo que desde el comienzo de los gobiernos del FA, la matrícula, es decir, la cantidad de estudiantes, bajó de 700.000 a 650.000, por “cuestiones demográficas” y “la fuga hacia la educación privada”, mientras que “los vínculos laborales en la educación aumentaron en 43.000”. “O sea que para 50.000 estudiantes menos, aumentamos el personal de la educación en 40.000 más. En cuanto al presupuesto de la educación, pasó de 845 millones de dólares a 2.100 millones de dólares por año, es decir, aumentó 1.200 millones para 50.000 estudiantes menos”, subrayó. Por lo tanto, Talvi invitó a hacer el cálculo, “porque es fácil”, cuyo resultado es que “teníamos 70 funcionarios en la educación por cada 1.000 alumnos, y ahora tenemos el doble”, además, “gastábamos 1.000 dólares por alumno al comienzo del gobierno del FA y ahora gastamos 3.000”.

Respuestas

Los dichos de Talvi no tardaron en repercutir dentro del Frente Amplio. El economista Mario Bergara escribió en su cuenta de Twitter que el candidato colorado “insiste con la cantarola de los 70.000 empleos públicos”, que es “un planteamiento totalmente falaz y técnicamente inconsistente”. “Parece ser que una maestra en un colegio privado está correctamente ocupada pero en la escuela pública es prescindible. O una enfermera está bárbara en una mutualista pero no en la salud pública. Un guardia de seguridad privado es propiamente un trabajador pero un policía parece que no. Es increíble a las cosas que lleva la desesperación política. Debilitar lo público es pensar sólo en aquellos que pueden pagar la educación, la salud y la seguridad privadamente. Y eso va en contra de un principio básico de solidaridad que ha pregonado históricamente el verdadero batllismo y la izquierda en el Uruguay”, sentenció Bergara.

A su vez, Fernando Isabella, director de Planificación en la Oficina de Planeamiento y Presupuesto y asesor del candidato del FA, Daniel Martínez, se refirió, en diálogo con la diaria, a los cálculos de Talvi sobre el sector educación. Subrayó que el candidato dice que hay más funcionarios por cada 1.000 estudiantes, que es lo contrario a decir que hay menos estudiantes por cada docente, que fue justamente el objetivo por el que ingresaron más. “Había clases de 40 estudiantes, y el objetivo es disminuir el tamaño de los grupos porque eso favorece el aprendizaje. Esto no es una máquina de fabricar chorizos, en la que cuantos más chorizos hagas por máquina es mejor; es una cosa un poquito más compleja. Los procesos de aprendizaje requieren un vínculo entre el docente y los estudiantes, y los grupos demasiado grandes conspiran contra eso”, indicó el jerarca. Por último, dijo que, con la perspectiva de Talvi, “si metemos 80 estudiantes por grupo, funcionaríamos bárbaro, y eso es un disparate”.