El fiscal de Flagrancia de 13º Turno, Rodrigo Morosoli, archivó las causas que investigaban el accionar de los funcionarios de gobierno tras las declaraciones de José Nino Gavazzo en el tribunal de honor del Ejército, en el que admite haber arrojado el cuerpo del militante tupamaro Roberto Gomensoro al río Negro. En cambio, según supo la diaria, el fiscal solicitó una audiencia para imputar al ex comandante en jefe del Ejército, Guido Manini Ríos, por omitir denunciar delitos en su repartición.
En el parte fiscal, Morosoli resume algunos de los testimonios de los integrantes del tribunal de honor que juzgó a Gavazzo. Entre otras cosas, el presidente del tribunal relató que luego de escuchar el testimonio del represor “nosotros nos miramos y dijimos, a la miércoles, esto es grave...” y acordaron que tenían que poner las declaraciones en conocimiento de la Justicia.
Según expresa el fiscal, el 11 de abril los miembros del tribunal le comunicaron a Manini la información que entendían que era de “naturaleza delictiva” y aguardaron a que diera las “órdenes pertinentes”, pero, en cambio, el comandante en jefe acusó recibo y “ordenó suspender las actuaciones”. A fines de ese mes, el comandante le dio órdenes al presidente del tribunal de continuar con “sus tareas” y terminar las actuaciones, argumentando que lo de Gavazzo parecía ser una “chicana” para dilatar la decisión.
“Tampoco consta que se haya efectuado denuncia penal alguna en ese momento por parte del comandante en Jefe del Ejército, ni que se haya comunicado el contenido de las declaraciones de Gavazzo a las autoridades del Ministerio de Defensa”, afirma el fiscal.
En cuanto a las actuaciones de los integrantes del Poder Ejecutivo (entre ellos, el presidente Tabaré Vázquez, el secretario Miguel Ángel Toma, el ex ministro de Defensa Jorge Menéndez y el ministro interino, Daniel Montiel), el fiscal entiende que cumplieron con los cometidos de informar y actuar en consecuencia.