A partir del anuncio del ex candidato del Frente Amplio Daniel Martínez de no participar en la carrera por la Intendencia de Montevideo (IM), el Centro Universitarios Socialistas (CUS) elevó este jueves una carta a la dirección partidaria y a las bases para transmitir su malestar sobre cómo se dio el proceso de discusión en la interna.

La seccional universitaria informa que una delegación “no representativa” comunicó a Martínez sobre “supuestas resistencias internas a su candidatura”, lo que llevó a que el ex candidato frenteamplista decidiera, finalmente, no postularse. En la misiva el centro hace alusión a la reunión que mantuvieron el secretario general Gonzalo Civila, Gabriela Barreiro, Manuel Laguarda y Lucía Zapata con Martínez, el 23 de diciembre, en la Casa del Pueblo, para transmitirle que su candidatura no contaba con los apoyos necesarios y que no era conveniente que se presentara nuevamente en una contienda electoral, informó este jueves Búsqueda. Según el semanario, previamente existió una reunión informal entre varios dirigentes socialistas en la que Civila manifestó que le parecía inconveniente que Martínez se presentara a la reelección.

Civila, por su parte, dijo este jueves a Radio Sarandí que el partido no tomó ninguna resolución sobre la eventual candidatura, sino que fue Martínez el que tomó la decisión final. Según dijo, el Comité Ejecutivo evaluó “los riesgos” sobre su postulación y respaldó la decisión de Martínez de no ser candidato a la IM.

A mediados de diciembre, Martínez había participado en algunas actividades puntuales del oficialismo y se reunió con allegados para tantear la posibilidad de candidatearse. El ex candidato del FA, además, había planteado a su círculo cercano su intención de volver al ruedo electoral y competir por la reelección.

Gabriel Segalerba, dirigente del CUS, dijo a la diaria que su intención es que otros centros del partido discutan sobre cómo se dio el proceso y consideró que sería positivo que la secretaría general respondiera la carta. “Es sano que se dé la discusión y marca una postura: hasta acá vamos nosotros”, sostuvo.

En la carta el colectivo resalta las virtudes de Martínez y afirma que es el “principal capital político” que el PS ha aportado al FA. Se destacan, en particular, dos aspectos de Martínez: se asegura que transformó la ciudad como intendente y realizó una excelente gestión, y como candidato a la presidencia “enfrentó una campaña compleja, en una coyuntura desfavorable, no exenta de resistencias en la propia interna del FA, logrando en la segunda vuelta una votación inesperada por la dirigencia, conquistada puerta a puerta”.

Ante el resultado obtenido en el balotaje, el CUS evalúa que la “posición política más racional” debió ser proponer como candidato a la IM por el FA a Martínez, ya que se considera que se ha “erigido como la figura de mayor caudal político del FA y del PS”. Además, la seccional manifiesta “enérgicamente” su disconformidad con el manejo de la secretaría general y con quienes participaron en eventos y charlas, y con el “manoseo del nombre” y de las “posibilidades supuestas” para la candidatura de Martínez.

Para Segalerba, la pérdida de Martínez en las elecciones departamentales es “demasiado importante”. El dirigente dijo a título personal que le “encantaría” que el ex candidato del FA revisara su postura y se presentara como candidato a la comuna. “¿Dónde vas a encontrar a un tipo con este grado de aceptación? En ningún lado”, valoró.

En la carta, el sector evalúa que los miembros de la dirección del partido “incurrieron en errores graves, actuando en forma irresponsable, poco transparente y antidemocrática, y no cabe aquí invocar buena fe u honestas intenciones [...]. Sorprende ver cómo algunos dirigentes se arrogan la representación ante un tema tan importante, desconociendo los organismos y la opinión de las bases socialistas”.

Para la CUS, estas decisiones “inconsultas” han “dilapidado un enorme capital político” y comprometen la victoria del FA en las elecciones departamentales. Ante esto, el centro solicita al secretario general, a la secretaría política de Montevideo y a los dirigentes que participaron en las “reuniones privadas con posturas personales” que asuman su “responsabilidad política”.