El presidente Luis Lacalle Pou decidió separar de su cargo por seis meses e iniciar un sumario administrativo a Miguel Ángel Toma, actual fiscal del gobierno y ex secretario de la Presidencia durante el período anterior. El ex jerarca está acusado de haber hecho viajes oficiales sin autorización presidencial y en compañía de una persona cuya misión no estaba definida. Toma aseguró que la medida dispuesta por Lacalle Pou lo tiene “absolutamente sin cuidado”. “No me afecta para nada, porque con esto de la pandemia igual no puedo viajar acompañado. Obviamente, el único motivo por el que yo estoy acá es poder irme a Europa con una amiga. Si no puedo hacer eso, que me suspendan”, declaró el fiscal del gobierno.

Acerca del plazo de la suspensión, que es de seis meses, Toma lo consideró “muy oportuno, porque en mayo ya va a estar todo el mundo vacunado contra el coronavirus, así que voy a poder viajar con mi amiga sin problemas. También voy a poder ir a ver a la Roma con esta amiga, porque los dos compartimos la pasión por el fútbol italiano. Y lógicamente que no es lo mismo ver un partido en enero próximo, con tribunas completamente vacías, que en mayo o junio, cuando ya va a haber público”.

Consultado sobre la posibilidad de ser destituido, Toma reconoció que en este caso sí lo afectaría, aunque por otro lado “la verdad es que a mis años a veces me canso de estos trotes, así que retirarme tampoco sería el fin del mundo”.