Los hermanos Alan y Edmond Reed heredaron una importante empresa familiar. En los últimos tiempos, Alan ha tratado de convencer a Edmond de venderla, a lo que su hermano se ha opuesto demostrando una vez más lo agrio y difícil de su carácter. Para colmo, la salud mental de Edmond se ha visto muy afectada en los últimos tres meses, lo que hecho que el doctor Hobson, su médico familiar, lo atienda directamente en casa. Esa noche tuvo la peor de sus crisis y Alan llamó al doctor de urgencia. Este entró a la habitación de Edmond a atenderlo y se escucharon dos disparos. Alan, que estaba con unos amigos, corrió y comprobó de inmediato que el doctor había muerto. Edmond, a pesar de todo, asegura que no lo mató. Una autopsia es imposible, dado que el doctor había dejado muy claro en su testamento que prefería ser cremado inmediatamente, lo que ocurrió al día siguiente. ¿Qué pasó realmente? Escribinos con la respuesta a [email protected].
Solución de la entrega anterior: El ladrón es Morgan. Sacó el collar antes de cerrar la caja fuerte, calculó los vientos con su veleta y con un globo de helio lo mandó hasta la montaña cercana, para ir a buscarlo el fin de semana gracias a su habilidad como montañista.