Buenos días. Les comento algunas noticias que pueden leer hoy en la diaria.

Todos sabemos que la emergencia sanitaria empeora la situación económica de muchas personas, pero el indicador más importante de que se disponía era el aumento de las solicitudes de seguro de desempleo. Ahora se dio a conocer un estudio del Instituto de Economía (Iecon) de la Udelar, que integra ese dato con una estimación de la pérdida de ingresos entre trabajadores informales y cuentapropistas, y arroja la preocupante conclusión de que la cantidad de personas en situación de pobreza se incrementó en unas 100.000 –más precisamente, de 94.000 a 127.000– durante el mes de abril.

Los autores del estudio calcularon también el efecto de las medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo para paliar ese perjuicio, y señalan que “moderan levemente” el aumento de la pobreza, pero resultan insuficientes para contenerlo. Además, estimaron que realizar transferencias monetarias para contrarrestar por completo el proceso costaría, a lo largo de un año, 0,44% del Producto Interno Bruto de 2019.

Las perspectivas de recesión y deterioro social son, ante todo, malas noticias para el país entero, pero es preciso también ubicarlas como datos en el terreno de la política, donde es previsible que alimentarán conflictos entre el oficialismo y la oposición.

El presidente Luis Lacalle Pou reivindica su papel protagónico en la conducción de todo lo que tiene que ver con la crisis, y esto es una espada con dos filos: capitaliza los aciertos y recibe directamente el impacto de los errores. Es previsible que desde el oficialismo se sostenga que el Iecon está alineado con la oposición frenteamplista, pero cuestionar al mensajero no va a ayudarnos a resolver los problemas.

La emergencia social tiene también repercusiones dentro de la “coalición multicolor”. Cabildo Abierto (CA) insistió mucho en asumir cargos relacionados con las políticas sociales, en línea con el perfil público que busca cultivar Guido Manini Ríos para mejorar su proyección futura. Así obtuvo, entre otras posiciones, la titularidad del Ministerio de Salud Pública, que hace unos meses no parecía de especial relevancia, pero que desde el 13 de marzo está en el centro de las políticas gubernamentales (lo cual implica grandes responsabilidades y riesgos, pero también la posibilidad de ganar prestigio si la situación sanitaria se mantiene dentro de límites manejables).

El otro lugar de CA en el Consejo de Ministros, ocupado nada menos que por la senadora Irene Moreira, esposa de Manini, es el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y –por ahora– Medio Ambiente (MVOTMA), que quedó bastante relegado en el marco de la actual emergencia, pero los cabildantes no se resignan a esto. En ese contexto hay que entender las aspiraciones de refuerzo presupuestal planteadas desde el MVOTMA, para lograr resultados “ambiciosos”, y también las objeciones a esas demandas desde el Partido Colorado, expresadas por el senador Adrián Peña.

Con un pie de cada lado, el subsecretario del MVOTMA, Tabaré Hackenbruch, comparte objeciones de su partido pero también los planes de Moreira. Cabe señalar que Peña está alineado con Ernesto Talvi, y Hackenbruch, con Julio María Sanguinetti.

Hasta mañana.