Un artículo de la ley de urgente consideración que establece mayores facilidades para que los retirados militares puedan portar armas generó polémica dentro y fuera del oficialismo. La norma fue propuesta por Cabildo Abierto (CA) y recibió críticas del Frente Amplio y también de algunos integrantes de la coalición de gobierno. Pero el senador de CA Guido Manini Ríos no sólo defendió el artículo, sino que propuso algunos agregados. “Creo que los militares retirados deberían estar habilitados para llevar su arma reglamentaria a las reuniones con sus socios políticos. Ellos están habituados a manejar armamento y están lo suficientemente formados en lealtad institucional como para usarlas solamente cuando hayan agotado todos los métodos pacíficos a su alcance para hacer entrar en razón a los políticos”, declaró el legislador.
Otro alto dirigente de CA, el subsecretario de Defensa Nacional, Rivera Elgue, también defendió el porte de armas para retirados militares en reuniones políticas. “Hay muchas herramientas para manifestar la discrepancia democrática dentro de una coalición de gobierno, como la discusión cara a cara o mediante la prensa o las redes sociales. Pero no hay nada como un arma. Si queremos que las soluciones urgentes que el país reclama no se demoren, necesitamos un método para convencer a los políticos con los que no tuvimos más remedio que juntarnos de cuáles son las verdaderas prioridades para la patria”.