Buenos días. Les comento algunas noticias que pueden leer hoy en la diaria.

El proyecto de ley de urgente consideración (LUC) se acerca al fin de su trámite parlamentario, y se pueden aplicar dos enfoques complementarios para evaluar el resultado que obtendrá, con él, el presidente Luis Lacalle Pou.

Por un lado, trae cambios de importancia en varias áreas que son resistidos por organizaciones sociales y por el Frente Amplio (FA), y está sobre la mesa la posibilidad de impulsar un referéndum en su contra. Por otro, marcó con claridad límites de los acuerdos oficialistas, porque varias propuestas de cambio aún más profundo carecieron de los votos necesarios para su aprobación y quedaron por el camino. Algunas de ellas fueron presentadas a sabiendas de que eso ocurriría, y en otros casos es probable que el presidente y sus colaboradores más cercanos no hayan previsto el desenlace.

La base programática de la “coalición multicolor” es el documento titulado “Compromiso por el país”, aprobado por los partidos Nacional, Colorado, Cabildo Abierto, Independiente y De la Gente para fundamentar su apoyo a Lacalle Pou en el balotaje. Se trata de un texto con definiciones muy generales sobre varias áreas, en las que seguramente no se consideró que conviniera profundizar más, para no exponer discrepancias durante la campaña para la segunda vuelta.

Luego, durante los procesos paralelos de redacción del proyecto de LUC y distribución de cargos (este último aún inconcluso), el equipo de Presidencia decidió ir más allá de aquel acuerdo, pero los aliados le recordaron, acerca de varias cuestiones, que no se consideraban obligados a votar iniciativas que no estuvieran contenidas expresamente en “Compromiso por el país”.

Las tensiones derivadas de esa situación son semejantes a otras que incidieron para que renunciara a la cancillería Ernesto Talvi, cuyo reemplazante, Francisco Bustillo, llegó ayer a Uruguay desde España y asumirá formalmente hoy, aunque su trabajo en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores no comenzará hasta que cumpla con la correspondiente cuarentena.

En “Compromiso por el país” no quedó escrito, por ejemplo, que el gobierno encabezado por Lacalle Pou fuera a calificar de dictadura al gobierno de Venezuela que encabeza Nicolás Maduro, ni que se propusiera apoyar al candidato de Donald Trump para presidir el Banco Interamericano de Desarrollo, contrariando la tradición histórica.

De todos modos, las organizaciones políticas y sociales opuestas a lo que quedó del proyecto de LUC tienen ante sí una decisión delicada, en relación con la posibilidad de promover un referéndum. La retórica contra el contenido de la iniciativa ha sido muy dura y no deja espacio para sostener que lo que se apruebe no resultará tan grave. A la vez, la aprobación del actual gobierno en las encuestas (en la que seguramente incide cómo ha manejado la emergencia sanitaria) abre dudas sobre el resultado que puede tener un esfuerzo derogatorio, y el tiro puede salir por la culata si Lacalle Pou y sus aliados terminan fortalecidos. El FA alega que la decisión está en manos del movimiento social, como si en este no incidieran los criterios políticos de los sectores frenteamplistas.

Hasta mañana.