Dos dirigentes de Cabildo Abierto (CA) abandonaron el partido desencantadas con su dirigencia, a la que acusaron de funcionar “como en un cuartel” y de haber abandonado las prácticas “horizontales”. Guido Manini Ríos rechazó estas acusaciones, al tiempo que anunció la instalación de un tribunal militar para juzgar a estas dos dirigentes. “Según nuestra normativa interna, quienes abandonan el partido son acusados de deserción ante un tribunal conformado por oficiales en actividad o retirados. Si son hallados culpables reciben una sanción que puede ir desde un año de cárcel en caso de que hayan abandonado a sus compañeros de lucha por no estar de acuerdo con sus superiores, hasta el fusilamiento si dejaron el partido por cobardía, algo que es mucho peor”.

La opinión de las dirigentes sobre esta medida aún no se conoció, ya que ambas fueron condenadas a diez días de arresto a rigor. “Cabildo Abierto tiene un funcionamiento interno eminentemente democrático, pero si permitimos que los dirigentes se alejen del frente de batalla, la tropa de los militantes se desmoraliza”, declaró Manini Ríos.

El año pasado el militante ambientalista Marcelo Hospitale abandonó CA al poco tiempo de integrarse, porque notó un trato “homofóbico” hacia él y su novio. Una fuente de CA reconoció que estos casos causaron “desconcierto”, ya que “estamos acostumbrados a que vengan loquitos del tipo neonazis, pero no del tipo que son capaces de venir acá buscando horizontalidad y respeto por la diversidad sexual”.