Todo parece indicar que el diputado nacionalista Gerardo Amarilla será el subsecretario del recientemente creado Ministerio de Ambiente. Si bien aún no está confirmado en el cargo, en la tarde de ayer adelantó algunas de las medidas que planea tomar en caso de que su designación se concrete. “Lo primero que voy a hacer es construir un arca gigantesca, con espacio suficiente para que habiten allí una pareja de cada una de las especies que nuestro Señor ha puesto en la Tierra”, dijo. Es que, para Amarilla, la principal amenaza para la ecología no son los plásticos de los océanos, la deforestación o las emisiones de CO2. “Como cristiano que soy, lo que más me preocupa es la ira de Dios, que puede causar más desastres naturales que cualquier otra fuerza conocida”, afirmó.
El legislador opinó que “si se tiene en cuenta que la coalición de gobierno no ha dado pasos concretos en materia de promover la familia y luchar contra el aborto, la educación sexual y la ideología de género, no sería raro que el Señor nos castigue con un diluvio universal”. Amarilla citó como ejemplo “de lo que se viene” una plaga de langostas que está haciendo estragos en Argentina y podría cruzar a Uruguay. “Dios los castigó porque el kirchnerismo ha sido siempre un gran enemigo de la cristiandad. En nuestro caso, Dios está esperando, porque en este gobierno hay mucha gente que entiende las enseñanzas de la Biblia. Pero si no estamos a la altura, vamos a tener tifones como el de Florida día por medio”.