El cardenal Daniel Sturla se reunió ayer con el candidato a intendente de Montevideo por el Frente Amplio Daniel Martínez y le reiteró el deseo de la iglesia católica de instalar un monumento a la Virgen María en la rambla del Buceo. La iniciativa había sido aprobada por Martínez en 2017, pero la Junta Departamental no la refrendó. Para Sturla, el monumento en cuestión “sigue siendo tan necesario como antes, porque es una de las pocas formas que tenemos de evitar que los jóvenes se entreguen a los placeres carnales en la playa, una costumbre que está acabando con nuestra juventud, no sólo desde el punto de vista moral, sino también desde la perspectiva fisiológica, porque las heridas cutáneas en las partes íntimas debido a los raspados de la arena son un problema de salud pública muy importante”. El líder de los católicos uruguayos consideró además que “la presencia de María puede servirles a las muchachas como ejemplo de que se puede ser maternal y bondadosa y, al mismo tiempo, inmaculada”.

Varios jóvenes reconocieron que, de concretarse, esta medida seguramente serviría para disminuir o eliminar el sexo en la playa. “Yo no soy muy católica, no voy a misa ni nada. Pero la verdad es que me inhibiría garchar con la madre de Dios mirándome. Creo que preferiría juntar plata e ir a un telo, o, en todo caso, esperar a que mis padres se vayan de casa”, declaró una joven que en verano acostumbra hacer el amor a orillas del Río de la Plata.