Si bien algunos artículos de la Ley de Presupuesto aún no cuentan con el apoyo de toda la coalición de gobierno, se estima que la inmensa mayoría del texto será aprobada sin problemas. Según el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Isaac Alfie, “más allá de pequeñas diferencias, todos los partidos que estamos en el gobierno seguimos creyendo que se puede cumplir el objetivo de que para 2025 el Estado tenga el tamaño de una ciruela, porque es la única forma de que los impuestos les permitan a los empresarios generar trabajo y sacar adelante al país”. El jerarca aclaró de todas maneras que esta reducción se va a hacer en forma “gradual”, para evitar “efectos traumáticos”. “Según nuestros cálculos, en 2021 el peso del sector público será equivalente al de un zapallo kabutiá, y en 2024 al de un tomate americano. Quizás a algunos les parezca que ese año el peso debería ser equivalente al de un tomate perita, pero queremos ser responsables y no prometer cosas que después no vamos a poder cumplir”.

Esto último parecería ser una respuesta al reclamo de algunas cámaras empresariales que criticaron la “tibieza” del gobierno a la hora de reducir el Estado. “Las empresas uruguayas no pueden competir en el mundo con un sector público que tenga el tamaño de una ciruela. Hay que achicarlo hasta que sea igual a una uva. Si no, el país productivo va a desaparecer”, declaró un representante de la Cámara de Industrias.