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Guido Manini Ríos, el 8 de setiembre, durante una conferencia de prensa en la sede de Cabildo Abierto.

Foto: Pablo Vignali, adhocFOTOS

Un frente que juega con todos

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Para el arranque, les propongo fijarnos en las coincidencias que el Frente Amplio tuvo con distintos sectores del oficialismo en los últimos días. El lunes, finalmente, se envió a la cámara de diputados el proyecto de ley de eutanasia que unifica una iniciativa frenteamplista y otra del colorado Ope Pasquet. Esto, que de algún modo continúa la expansión de derechos impulsada por los gobiernos progresistas, molestó al sector más derechista de la coalición gobernante, Cabildo Abierto, al punto que su guía, Guido Manini, le solicitó al presidente Lacalle que vete la futura ley, dado que la izquierda y el centro cuentan con mayorías para aprobarla. (El viernes publicamos estos comentarios humorísticos sobre la indignación de Manini).

Al día siguiente, sin embargo, los diputados de Cabildo Abierto olvidaron el enojo y se unieron a los del Frente Amplio para frenar dos controvertidos proyectos turísticos en Río Negro y Rocha. Fue el turno del blanco Alejo Umpiérrez, intendente rochano, de airear su molestia, en este caso con el partido de Manini.

El jueves, en tanto, se conoció una ambiciosa iniciativa frenteamplista que implica a los partidos con representación parlamentaria: una reunión para lograr acuerdos mínimos. Según adelantó, se buscará blindar al sistema político ante el embate económico del narcotráfico, se tratará de bajarle intensidad a diversos problemas de “convivencia” interpartidarios y, quizás, se converse sobre la reforma de la seguridad social. No es poco para una fuerza de oposición.

Un protagonista

También podemos entrarle a la semana política uruguaya a través de una figura individual. Ocurre que Nicolás Martinelli, hasta ahora asesor del presidente Lacalle, está asociado a dos asuntos de relevancia. Por un lado, el domingo se supo que fue designado nuevo “número tres” de una cartera que arde, el Ministerio del Interior, luego de que Luis Calabria renunciara, en una derivación (inesperada para el oficialismo) de las acusaciones contra el senador frenteamplista Charles Carrera. Este, por otra parte, denunció al ministro del Interior ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en el entendido de que Luis Alberto Heber ha incurrido en “persecución y hostigamiento” contra su persona. Que Carrera haya acudido a un tribunal internacional les pareció desmesurado al director de los medios públicos, Gerardo Sotelo, y al senador oficialista Jorge Gandini.

Martinelli también aparece lateralmente en un episodio conectado con la flexibilización de las medidas antitabaco instaladas en el primer gobierno de Tabaré Vázquez. Cuestionada por especialistas y por organizaciones políticas y sociales, el decreto presidencial que permite mejorar la presentación de las cajas de cigarrillos tiene un fundamento poco razonable.

Un plebiscito para estudiar

El domingo pasado, los chilenos se pronunciaron contra la reforma de la carta magna que había elaborado la Asamblea Constituyente. Si bien el resultado era el que anunciaban las encuestas, la magnitud del “rechazo” obliga a reflexionar sobre sus causas, sobre todo teniendo en cuenta la intensidad que tenía el impulso reformista hace apenas dos años. El presidente Gabriel Boric captó el mensaje y modificó su gabinete para incluir a figuras de izquierda que ya habían ocupado cargos en los gobiernos de Ricardo Lagos y Michelle Bachelet.

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