Uruguay pedirá información a la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de Paraguay sobre una organización que viene siendo investigada desde hace al menos ocho meses y que, en las últimas horas, derivó en un operativo en una estancia propiedad de un uruguayo.

Según la información reportada por la Senad, el operativo de la Unidad Especial de Inteligencia Sensible Antinarcótico y Hechos Punibles Conexos permitió la incautación de 440 kilos de cocaína dispuestos para viajar en un avión de matrícula boliviana, presuntamente con destino a Uruguay.

En el operativo también se incautó un Mercedes Benz y 20 bidones de combustibles para avión. Según la investigación del fiscal Isaac Ferreira, en el campo había una pista de aterrizaje y el predio sería utilizado para que los aviones carguen combustible y luego seguir viaje a Uruguay.

El procedimiento se concretó en la estancia Tacuarembó, un predio ubicado en la localidad de Arazapé, en el departamento de Misiones, que pertenece a una familia de uruguayos, de apellido Silva, y que había sido arrendado a la empresa Agroalianza SA, representada por el empresario arrocero Ignacio Esteban Heisecke Vargas.

Los servicios de inteligencia y la fiscalía paraguayos venían investigando a la organización criminal que traficaba cocaína procedente de Bolivia y cuyo destino era Uruguay. En el operativo fueron detenidas cinco personas, dos bolivianos y tres paraguayos. La información que pudo recabar la fiscalía en los ocho meses de investigación indica que se realizaban vuelos semanales entre Bolivia y Uruguay.

En rueda de prensa, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, dijo este martes que la Dirección General de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas (DGRTID) desconocía la investigación que estaban llevando adelante la Policía Nacional y la Secretaría Nacional de Drogas de Paraguay y destacó que la DGRTID “no fue advertida de la posibilidad de que podía venir un cargamento de este tipo”.

El ministro dijo que, a raíz de la información difundida por los medios paraguayos, se comunicaron con las autoridades del Senad para requerir más información y conocer “si hay otros viajes que no tenemos registrados”.

“Seguramente tenemos que ahondar y mejorar nuestros servicios y contactos de información para poder accionar”, agregó el ministro. Heber planteó que en su último encuentro con las autoridades del Senad le informaron que en cielo paraguayo transcurren unos 390 vuelos clandestinos al año.