Este miércoles a las 0.06 comenzó el otoño, la estación del año en que los árboles se visten de ocre, naranja y oro, el calor del verano empieza a disminuir para darles paso a mañanas y noches frescas, y el sol, de a poco, se esconde más temprano. Este año, el cambio de estación llegó con fenómenos climáticos adversos y una doble alerta naranja y amarilla por “tormentas fuertes y lluvias intensas” del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet).

De hecho, según el informe de tendencias climáticas estacionales que elabora el instituto, para lo que queda de marzo y abril y mayo se espera que “la precipitación acumulada” esté por “encima de lo normal y normal”, con diferencias entre “dos regiones”. La probabilidad de lluvias será mayor en el “norte, noreste, parte del litoral oeste y este del país”, mientras que en el sur y suroeste se espera que las lluvias estén dentro del rango normal.

En el caso de las temperaturas, el organismo señala que estarán “dentro de lo normal” en todo el territorio nacional, y no agrega más detalles.

En el documento, el Inumet explica que la tendencia “se realiza en función de la actual coyuntura climática, las relaciones estadísticas históricas demostradas entre el clima local y condiciones de temperatura de superficie del mar remotas y las salidas de los modelos climáticos de predicción en centros de investigación internacionales”.

A su vez, el informe de tendencias climáticas se presenta “en forma de sesgos en la distribución de probabilidad, es decir, en función de la probabilidad de que el registro del trimestre entre en el tercil superior, medio o inferior de la distribución climatológica”.