Buenos días. Les comentamos algunas noticias que pueden leer hoy en la diaria.

El lunes se iniciará el proceso de diálogo y negociación entre el gobierno, los partidos políticos y más de 100 organizaciones de la sociedad civil para diseñar el plan nacional de seguridad pública, que deberá estar pronto para principios del año que viene. Ayer, el ministro del Interior, Carlos Negro, presentó el plan de acción y el cronograma planificado a autoridades de los partidos políticos con representación parlamentaria, con excepción de Identidad Soberana, que no asistió. Las 30 mesas que se implementarán a partir de la semana que viene buscarán consolidar una mirada de “política pública” a mediano y largo plazo, y que las políticas no estén “corriendo de atrás a los hechos”. Para Negro, “la única forma” en que entienden “que se superan los problemas estructurales es con el trabajo conjunto de todo el sistema político para superar diferencias políticas de coyuntura”. “Queremos trabajar en un modelo de seguridad Uruguay y lo queremos hacer desde un país como el nuestro, que tiene un sistema político maduro y democrático”.

Quizás con la misma intención, los senadores colorados de Vamos Uruguay, Pedro Bordaberry y Tabaré Viera, propusieron a los demás partidos con representación en la cámara alta la conformación de un espacio de “coordinación ampliada” para “explorar y avanzar en temas y proyectos de ley” en los que pueda haber “acuerdos sustantivos” y en “el otorgamiento de venias, designaciones y ascensos” en distintos organismos. Para estos legisladores, la inédita configuración del actual Parlamento –sin mayorías absolutas en Diputados y con un empate en la Asamblea General entre oficialismo y oposición– los interpela “a ejercer una política basada en el diálogo, la búsqueda de consensos y la construcción de acuerdos duraderos”.

Y buscando acuerdos duraderos, el secretario general del Partido Colorado (PC), Andrés Ojeda, y el diputado Felipe Schipani presentaron en nombre del PC al presidente del Frente Amplio, Fernando Pereira, una propuesta para crear “un grupo de trabajo” para avanzar en la reducción del ciclo electoral, teniendo en cuenta que “hay como una especie de cansancio”. Según Ojeda, “la idea” es “poder llegar con una reforma que se pueda aplicar ya de cara al 2029”. “A esto le falta bastante agua bajo el puente, pero principio tienen las cosas”, enfatizó).

Si el plan de seguridad debe ser participativo y a la vez efectivo, es evidente que deberá contar con el trabajo de la Secretaría de Inteligencia Estratégica del Estado. El martes, quien la dirige, Mario Layera, asistió al Parlamento a presentar los planes del organismo para este quinquenio y aseguró que el crimen organizado es “el tema principal” que los ocupa. Sin embargo, hizo un listado de significativas carencias que tiene la secretaría que deberían preocupar a todo el sistema político.

Seguramente, en las 30 mesas que confeccionarán el plan de seguridad, la temática de la educación aflorará como un catalizador de las soluciones. Ayer, los docentes de Educación Media tuvieron Asambleas Técnico Docentes para debatir un documento con acuerdos sobre aspectos a revisar de la reforma curricular ejecutada por la anterior administración. Entre los cambios se propone retomar la orientación biológica, reducir espacios de optatividad y eliminar la no repetición entre séptimo y octavo grado.

Hasta mañana.