Este “orden mundial” del pretendido y recién iniciado neoimperialismo trumpista sólo ofrece perjuicios al resto del planeta y ha generado grandes resistencias dentro y fuera de su país.
Se pueden observar las prevalencias más altas de consumo de tranquilizantes y antidepresivos en universitarios. El 41% de los tranquilizantes se consumen sin prescripción médica (en población general es 20% y en liceales es 7%).
Es difícil en un país como Uruguay, tan alejado del mundo, pensar primero en el mundo antes de diseñar estrategias, pero todo lo que se haya pensado se debería revisar a la luz de esta realidad volátil, incierta y turbulenta.
La universidad del futuro zurcirá agendas territoriales, regionales y globales para poder generar una oferta de formación que sea accesible, inclusiva, pertinente y potenciadora de los diferentes perfiles individuales.
¿Puede Trump revertir aspectos centrales del declive norteamericano? Para responder quizás convenga observar las grandes tendencias o el diseño estructural en el que se enmarca su acción con puntería refundacional y estilo matón.
La Universidad que queremos es una Universidad para el país. Una institución presente en los hospitales, en las escuelas, en las cooperativas, en los barrios, en las empresas públicas y privadas
Si Ghierra pudo exponer las hermosas imágenes de su filmación ha sido porque el patrimonio arquitectónico de Montevideo se ha protegido y se protege. Montevideo tiene quien lo proteja
No hay libertad sin igualdad. La desigualdad es fuente de dominación y, por tanto, afecta a la libertad. Desde la perspectiva del republicanismo democrático, garantizar esa libertad requiere del papel fundamental de la educación pública.
Dentro de unos años, nuestros nietos se avergonzarán del triste papel de Occidente en este genocidio. Señor Bordaberry, yo estoy con los palestinos y contra la “barbarie”, en el sentido que usted le da a esta palabra.