El informe de la auditoría realizada por el Tribunal de Cuentas (TCR) en el Municipio de Florencio Sánchez concluyó que “las debilidades de control interno constatadas” en el funcionamiento de ese concejo y “en el manejo de los bienes” del Municipio facilitaron la realización de delitos por parte del exalcalde Alfredo Sánchez y varios integrantes de su familia que fueron comprobados por la Justicia.

Los auditores del TCR no pudieron acceder a la documentación que utilizó la fiscal letrada de Rosario, Sandra Fleitas, para reclamar las condenas de los integrantes de la familia Sánchez, pero revisaron documentación existente en ese Municipio coloniense, además de entrevistar a funcionarios y a los integrantes de ese concejo municipal.

“El objeto de la auditoría consistió en identificar las debilidades de control interno y evaluar si las mismas facilitaron los delitos constatados en la investigación judicial que condujo al procesamiento de las autoridades de los municipios”, aclara el informe fechado el 15 de junio, al cual tuvo acceso la diaria.

Cabe recordar que la intervención del TCR en el Municipio de Florencio Sánchez fue reclamada por la Junta Departamental de Colonia, además de haber sido impulsada de oficio por miembros del mismo órgano de contralor.

En el Municipio de Florencio Sanchez, al igual que en los restantes municipios del departamento de Colonia, la organización administrativa, financiera y contable es realizada por una oficina administrativa de la Intendencia que funciona junto al Municipio, que depende de la Dirección de Hacienda y Administración de esa comuna, explicaron los auditores.

En esa oficina no existe “una adecuada separación de funciones”, “ni manuales de procedimientos que definan las tareas y responsabilidades de los funcionarios que manejan los fondos”.

En el análisis de la documentación se constataron procedimientos que van a contramano de las normas que rigen la administración pública. Entre ellos, los auditores destacaron que “la totalidad de los gastos realizados son enviados a la Intendencia con posterioridad al pago de los mismos para la intervención del contador delegado del Tribunal de Cuentas, incumpliendo con lo establecido en esta norma”, y esos gastos “son observados por el contador delegado” del TCR e igualmente reiterados por el ordenador competente.

También se constató la presencia de órdenes de compra de gastos ejecutados y pagados sin las firmas exigidas de alcalde y dos concejales, así como gastos registrados en forma previa a la emisión de la orden de compra correspondiente, “por lo que los mismos no cuentan con la autorización del ordenador competente, no cumpliendo con lo establecido en esta norma”.

Además, “todos los gastos” fueron realizados por el procedimiento de compra directa, “sin efectuar la invitación a un mínimo de tres oferentes a participar del procedimiento”. Respecto de la administración de los recursos humanos, la auditoría constató que en el Municipio de Florencio Sánchez no existe ningún dispositivo de registro de asistencia del personal ni un mecanismo de control para la realización de las horas extras, sino que “se apela a la observación visual”.

Sobre el funcionamiento del Municipio en tiempos de Sánchez, se señala que omitió realizar las convocatorias a las sesiones, “así como sesionar con la frecuencia requerida por el reglamento -dos reuniones mensuales-”. “Durante varios meses el consejo no funcionó” y tampoco se publicaban las decisiones del concejo, que deben ser publicadas y colocadas en cartelera.

Así las cosas, “las debilidades de control interno constatadas en el funcionamiento del concejo y en el manejo de los bienes del municipio facilitaron la realización de los delitos comprobados por la Justicia”, señala la auditoría. No obstante, valoró que las actuales autoridades del Municipio de Florencio Sánchez, ahora guiado por la alcaldesa nacionalista Angie Figueredo, “están implementando las medidas necesarias para fortalecer las áreas afectadas”.