Por determinación de la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes), el martes y miércoles de esta semana hubo paro de actividad y movilizaciones en liceos de todo el país.

“Esta medida no viene descolgada, sino que, por el contrario, ha sido procesada profundamente por las diferentes filiales”, aseguró Marcela da Col, presidenta de Fenapes. En tanto, el vicepresidente de Fenapes, José Olivera, aclaró: “Este es un paro político cuyos motivos políticos expresan nuestro rechazo al proyecto ideológico que en materia de educación lleva adelante la coalición gobernante”. En ese sentido, especificó que ese “motivo político tiene que ver con decirles a los estudiantes y a las familias que se les está vulnerando sistemáticamente su derecho a la educación”. Hizo referencia a que desde 2020 la educación media superior es el “epicentro” de los “recortes” de presupuesto.

Por su parte, en un acto partidario desarrollado el miércoles en la explanada de la Intendencia de Colonia, el candidato a presidente por el Partido Nacional (PN), Álvaro Delgado, dijo que ese paro docente y acompañado por el PIT-CNT fue “insólito”, porque “dejaron a los gurises sin clases para repartir listas del Frente Amplio (FA)”.

El candidato nacionalista aseguró que la paralización fue realizada “sin ninguna excusa, porque, capaz, había alguna excusa que coincidía justo a 11 días de las elecciones, pero ni siquiera eso, porque ayer salió el dato de que los docentes tuvieron una recuperación salarial del 3% por encima de lo que percibían en la prepandemia”. “Se trató de un paro político crudo y duro, que dejó a los niños y a los padres de rehenes por un capricho ideológico del PIT-CNT para apoyar al FA”, insistió.

Además, Delgado dijo que “con la transformación educativa los gremios de la educación no vuelven más a dirigir la educación”.