En los últimos años, el balneario Santa Ana, ubicado en las costas del Río de la Plata, a unos 30 kilómetros de Colonia del Sacramento, ha multiplicado la cantidad de habitantes. Vecinos de ese lugar recuerdan que hace unos diez años el número de personas que residían anualmente era cercano a las 300 personas y que hoy ya son cerca de 1.000. Por si fuera poco, cada verano la población crece aún más al influjo de centenares de turistas que llegan para disfrutar de ese balneario coloniense.
El balneario fue creado a mediados de la década de 1940, cuando cuatro hermanos de apellido Greising, propietarios de comercios de Tarariras y Nueva Helvecia, compraron un antiguo casco de estancia en esa zona. Allí proyectaron la creación de un balneario, que tendría centenares de lotes, decenas de calles –rectas algunas y sinuosas otras– y un par de avenidas centrales, todo rodeado de una espesa vegetación.
Posteriormente, la familia Greising y vecinos del lugar comenzaron a nivelar las dunas y a desarrollar una frondosa forestación, algo que todavía hoy distingue al lugar.
Posteriormente, en agosto de 1974, una veintena de vecinos del balneario se reunieron por primera vez en la hostería Don Guillermo, ubicada en la rambla principal, para fundar el Club Social y Deportivo Santa Ana, institución que forma parte del lugar y que ha permanecido a pesar de los cambios y transformaciones.
El club se ubica a poco más de dos cuadras de la rambla, sobre la calle principal de acceso al balneario por la ruta 1. En esa esquina, que alberga aproximadamente dos manzanas, se ubica una sede con canchas de bochas, fútbol siete, tenis, vóleibol, juegos infantiles y un área muy grande de césped y bancos en la que se puede disfrutar de la sombra de enormes árboles.
En diálogo con la diaria, el actual presidente de la institución, Edson Rodríguez, dijo que en los últimos años “hemos venido trabajando con el objetivo de mejorar el espacio que libremente puede ser utilizado por los miles de turistas que visitan Santa Ana cada año”. “La placita se convierte en un lugar muy utilizado por toda la comunidad”, destacó Rodríguez.
El presidente de la institución comentó que unos 80 socios contribuyen con una cuota anual de 480 pesos, “que funciona de manera simbólica, dado que es una mensualidad muy baja”. Por esa razón, en 2023, para “potenciar la parte social”, el club presentó dos proyectos sociales que fueron seleccionados en sendas convocatorias a ideas.
Uno de ellos fue presentado al Fondo Región Colonia, organización que desde 2007 ha financiado más de 100 proyectos presentados por organizaciones civiles del departamento. Ese proyecto se denominó “Más inclusión, mejor sociedad”; en esa convocatoria “quedamos seleccionados”, por lo que el club accedió a recursos económicos necesarios para la instalación de dos juegos inclusivos: un sube y baja y una hamaca para usuarios en silla de ruedas, explicó Rodríguez.
El otro proyecto social fue presentado al Programa de Desarrollo Local Valor Compartido de Ancap. “Luego de que un vecino donara un aro de básquetbol, pensamos en poder generar una cancha multifunción en el predio”, comentó Rodríguez. A partir de esa idea, “presentamos el proyecto al directorio de Ancap, que lo aprobó y aportó 400 bolsas de pórtland que podremos retirar durante todo este año”.
Considerando que se podía volver a presentar para la edición 2024 de ese programa, “solicitamos otra partida de bolsas de pórtland y vamos a construir la cancha para que se pueda utilizar para varios deportes”, agregó.
Una vez construida la cancha, “tenemos acordado con la Intendencia de Colonia la donación de un arco integrado con el aro”. Vale destacar que “el predio donde se encuentran estas instalaciones es abierto a todo público”.
En la línea de brindar deporte y recreación, la comisión del Club Santa Ana logró un acuerdo con la Dirección de Deporte de la comuna coloniense para que asista un profesor de Educación Física. “Los martes desde las 15.30 hasta las 17.00 contamos con un profesor para realizar actividades físicas para niños y adolescentes, de forma libre y gratuita”, explicó Rodríguez.
La comisión directiva del club está compuesta “por siete vecinos vinculados a distintas actividades, como aquellas que están relacionadas con el campo, el transporte, oficinas administrativas o profesionales”, por lo que las visiones que se tienen sobre distintos temas “son muy variables”, explicó Rodríguez, y añadió que “juntarse y sentarse a escribir los distintos proyectos lleva su tiempo, y es por eso que la ejecución se da de manera paulatina y según el tiempo que vamos teniendo”.
Más allá de todo, “lo que queremos es que la gente se involucre, esté presente y que la comunidad pueda disfrutar de las instalaciones con las que hoy cuenta el club”, concluyó Rodríguez.