En setiembre de 2021, la entonces fiscal letrada de Rosario, Sandra Fleitas, condenó con prisión a Alfredo Sánchez, del Partido Nacional (PN), alcalde de Florencio Sánchez en aquel momento, en el marco de una investigación denominada Corruptio.

Además de Sánchez, otras seis personas fueron condenadas por delitos contra la administración pública cometidos en el municipio de esa localidad, ubicada al norte del departamento de Colonia. Entre los delitos aparecen los de asociación para delinquir, fraude, concusión, cohecho calificado, falsificación ideológica y encubrimiento.

La estructura delictiva que lideraba el conocido como “el hombre de las mil gauchadas” contaba con varios familiares directos: su hijo Pablo, quien fue edil departamental del PN; su nuera, Nancy López, concejala en el municipio local, y Luján, su hija, que en aquel momento era su primera suplente y que el domingo pasado consiguió ser la más votada en las elecciones municipales, por lo que volverá al municipio, esta vez como alcaldesa titular de Florencio Sánchez.

Tras la determinación de la Justicia de condenar por corrupción a Sánchez, a su hija y a su nuera, entre otros funcionarios municipales, el municipio local estuvo acéfalo durante varios días, hasta que el 5 de octubre de 2021 Angie Figueredo, quien integraba la lista 22H que lideraba el exalcalde, se convirtió en la nueva alcaldesa.

Declaración en el Juzgado de Colonia

Este martes, Angie Figueredo y Alfredo Sánchez se presentaron en el Juzgado Letrado de Colonia del Sacramento para declarar en condición de testigo de siete empresas monotributistas que presentaron una denuncia ante la comuna coloniense. En la puerta del juzgado, en diálogo con medios locales, Sánchez dijo que estos trabajadores “cobraron por trabajos realizados hasta el mes de agosto de 2021, y cuando yo fui preso, a mediados de setiembre, la intendencia le quedó debiendo algunos días de ese mes”. Si bien 19 empresas fueron las que prestaron servicios en esa oportunidad, siete son las que actualmente demandan a la comuna.

Sánchez explicó que “no eran funcionarios contratados” por la comuna, sino “monotributistas con presupuesto”. “Ellos presupuestaban y hacían trabajos de albañilería, entre otras cosas, dado que el intendente [Carlos Moreira] no nos mandaba muchos peones y teníamos muchas cosas para hacer en la localidad”, comentó Sánchez.

Según dijo el exalcalde, los monotributistas “dejaban las libretas en un cajón del municipio”, porque “ellos andaban con ropa de trabajo y no se las llevaban”. Cuando “ellos facturaban, yo daba la orden y pasaban por caja. Si estaba todo en regla, se les pagaba”, afirmó.

En una nota realizada en abril, en el marco de la demanda de acceso a la información pública que el periodista Sebastián Cáceres, director del periódico Centenario de Florencio Sánchez, inició contra la Intendencia de Colonia, el abogado Edgardo Nieves, representante legal de la comuna, presentó un escrito al que tuvo acceso la diaria. Allí se señala que, “respecto a la afectación al erario público” que tuvieron las maniobras de corrupción lideradas por Sánchez, “la misma no se ha podido evaluar puesto que la Intendencia de Colonia no ha tenido acceso a la carpeta investigativa del caso en el que resultó la condena por disposición de Fiscalía [de Rosario]”, y porque “la intendencia enfrenta una serie de procesos civiles iniciados por los monotributistas”, cuyas boletas fueron utilizadas por Sánchez para justificar gastos del municipio, “aduciendo la existencia de una relación laboral, lo cual es controvertido por nosotros”.

Por su parte, Figueredo, que pertenecía al sector de Sánchez pero actualmente fue candidata a la reelección por el sector de María de Lima, aclaró que ella comenzó en octubre de 2021 con su gestión al frente del municipio, “pero la demanda es por el mes anterior”.

Los monotributistas, la mayoría correspondientes al Monotributo Social del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), “han ido al municipio a realizar dichos reclamos”, sostuvo Figueredo, pero “desde que comenzamos nuestra gestión elevamos toda la información a la Intendencia de Colonia con los reclamos pertinentes”.

La alcaldesa saliente comentó que en aquel momento “todo lo que tenía que ver con planillas correspondientes a este tema fue enviado a las oficinas de la intendencia”, y además “funcionarios de la comuna se llevaron una caja que contenía las libretas de los monotributistas”.

Consultada acerca de si obtuvo alguna respuesta de jerarcas municipales, Figueredo respondió que “en más de una oportunidad se le consultó a la directora de Jurídica, Soledad Pérez, pero nunca obtuvimos una devolución por parte de ella”.

“Desde el inicio de mi gestión las empresas nunca trabajaron en el municipio y siempre nos arreglamos con los funcionarios que nos daba la intendencia”, concluyó Figueredo.