La foto fue tomada a fines de noviembre en el número 24 de Saint-Honoré, local de Hermès que visitaron los 11 finalistas del concurso internacional “Le grand prix du carrè”, organizado por la grifa francesa. Entre ellos posa el uruguayo Antonio Carrau, que envió primero su carpeta de trabajos y en una segunda etapa su diseño para el icónico pañuelo de seda Hermès, que se fabrica desde la década de 1930. Un jurado presidido por Pierre-Alexis Dumas, nieto del fundador y actual director artístico de la casa de moda, seleccionó a Carrau entre 5.500 postulantes, colocándolo así junto a colegas provenientes de Hong Kong, Tailandia, Corea, Japón, Estados Unidos, Inglaterra, Bélgica y Francia.
El concurso difundido por la plataforma Design Boom exigía en primer término un portfolio, un texto breve y un boceto. Superada esa instancia, se eligieron 97 candidatos para que trabajaran en el diseño de un modelo para la competencia. De allí salieron los 11 finalistas invitados a visitar París para una inmersión en la marca de alta gama. Carrau quedó impresionado por el nivel de tecnología con el que cuenta, la meticulosidad de los procesos, los controles de calidad. “Nos mostraron las fábricas Hermès en Lyon, la tienda principal, tuvimos reuniones. Todo es perfecto, no hay margen de error. Por ejemplo, la persona que digitaliza el diseño le dedica entre 300 y 700 horas. Nos mostraban los archivos de color, podés aclarar el pigmento y mezclarlo con otros, es decir que combinando podés hacer más todavía”.
Los seleccionados recibieron una edición especial del pañuelo hecho para este concurso y les regalaron un capullo del gusano de seda. El 17 de enero, después de la experiencia del viaje, cada uno mandó su diseño final, en base a la devolución que tuvieron en Francia. Falta la etapa final, el 1º marzo, cuando anuncien los ganadores, que se llevarán 5.000 euros. El premio implica que el pañuelo que diseñaron se va a vender dentro de la colección Hermès.
Confidencial
Carrau, de 31 años, estudió diseño gráfico en la Universidad Ort e integra desde hace seis años el estudio Atolón de Mororoa. Se interesó en esta competencia ya que había hecho pañuelos y en esa área Hermès siempre fue un referente. “Hace un par de años hice una estampa, una colaboración para Pastiche, y se hicieron distintas telas, para bikinis, vestidos, mallas. Los pañuelos fueron una exploración por mi cuenta, buscando hacer cosas más que un negocio, porque se necesita una escala y acá no funciona”.
El reglamento del concurso le impide revelar el diseño que envió a Francia. “Es como los collages que hago habitualmente con papel glacé o con papel afiche. Me gusta la técnica, no importa si va a ser una pieza textil, un mural o simplemente un collage. Me gusta la limitación que tiene la paleta del clásico glacé, con diferentes colores y saturaciones. Al principio hacía collages sólo en blanco y negro: creaba texturas en hojas con aerosol y después las usaba. En algún momento quise empezar a usar color, tenía un paquete de papel glacé y es más fácil si ya tenés una paleta limitada que si tenés que fabricar vos los colores. Las limitaciones ayudan a obtener resultados interesantes, y también es una cosa menos en la que tenés que pensar”, explica.
En este caso la consigna era bastante abierta. “La única regla que había era la medida: 89 por 89 centímetros; la técnica y la paleta eran completamente libres. Dentro de Hermès tienen una sección de color, de manera que toman un diseño y eligen los colores en los que se va a imprimir. Hacen variaciones, lo adaptan, supongo que por eso no había restricciones en ese sentido”.
Carrau destacó que cada finalista, de distinta formación y edad, mostró un estilo bien marcado. “La devolución que nos dieron fue más una charla sobre decisiones de diseño, no de profesor a alumno sino un ida y vuelta. Te daban su opinión y podías sacar cosas para aplicar. Todos los participantes tenían buen nivel, pero hacían cosas muy distintas. Al final les importaba el estilo de cada uno”.
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Carteles en Colonia
Uruguay Cartel, un festival de diseño de pósters que tiene lugar en Colonia del Sacramento, tuvo su primera edición a comienzos del año pasado y hasta fines de enero se encuentra abierto el llamado para presentar diseños de afiches dentro de la categoría internacional. El tema es “Degradé social” y se seleccionarán 60 carteles en formato 100 cm x 70 cm que serán exhibidos en el Centro Cultural Bastión del Carmen del 29 al 31 de mayo. El jurado está compuesto por Diana Ramírez (Bolivia), Javier Jaén (España), Coco Cerrella (Argentina), Natalia Volpe (Argentina) y Krisztian Gal (Hungría). Por más datos: www.uruguaycartel.com.
Pintura al fresco
El Museo Torres García invita a dar un paseo matinal de lunes a sábado, de 8.00 a 14.00, por el Botánico (19 de Abril 1181) y visitar la exposición Actos de pintura: paisajes del Jardín Botánico de Montevideo, resultado del taller de pintura al fresco que dicta Federico Méndez. Al mismo tiempo anuncia las inscripciones para el taller, de duración anual, que comenzará el 7 de marzo y se realizará los sábados de 17.30 a 21.30 a un costo de 2.640 pesos (no incluye materiales). Consultas por el 29162663 y el correo [email protected].