La Policía de Cataluña ingresó el martes a la Universidad de Lleida y detuvo al rapero Pablo Hasél, quien tenía plazo hasta la tarde del viernes pasado para presentarse ante un tribunal español e ingresar voluntariamente en prisión.

Hasél había sido condenado a nueve meses de cárcel por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona, y la condena ya había sido ratificada por la Justicia española.

El lunes, el músico, junto con decenas de simpatizantes, se atrincheró en la mencionada institución educativa, desde donde lanzó un mensaje por Twitter: “Estoy encerrado junto a bastantes solidarios en la Universitat de Lleida (UdL), tendrán que reventarla para detenerme y encarcelarme. Es en el rectorado de la Rambla Aragó, por si alguien de por aquí quiere echar una mano”.

La orden de busca y captura fue dictada ese mismo día. Horas más tarde, el artista fue retirado de la universidad en medio de un fuerte dispositivo policial con decenas de agentes y una veintena de vehículos antidisturbios, según reportó el diario El País de España.

La Policía autonómica debió sortear las barricadas construidas con sillas y mesas por los simpatizantes de Hasél, y el único episodio de violencia ocurrió en el momento en que los agentes accedían al edificio, cuando los manifestantes descargaron sobre ellos el contenido de varios extintores.

Hasél, que esperaba su detención en el tercer piso del edificio, no se resistió, y se manifestó a los gritos cuando pasó frente a los periodistas que cubrían el hecho: “¡Nunca nos callarán! ¡Muerte al Estado fascista!”. La condena de nueve meses de prisión se elevará a más de dos años, porque incluía una multa que el rapero se negó a pagar. Además, Hasél tiene una condena de dos años en suspenso y otras dos que fueron recurridas.

Un grupo de persona bloqueron las entradas de la Universidad de Lleida, donde posteriormente fue detenido Pablo Hasel, el 15 de febrero.

Un grupo de persona bloqueron las entradas de la Universidad de Lleida, donde posteriormente fue detenido Pablo Hasel, el 15 de febrero.

Foto: J. Martin, AFP

Fuentes penitenciarias informaron a la agencia de noticias Efe que el rapero fue internado en el módulo de ingresos de la cárcel de Ponent en Lérida, donde, de acuerdo al protocolo, una vez identificado se le realizan los cacheos correspondientes y una prueba PCR.

La junta de tratamiento del penal tiene dos meses de plazo para que el detenido sea evaluado por técnicos que deberán proponer su clasificación penitenciaria. Nada impediría que Hasél accediera directamente a un régimen de semilibertad, que le permitiría salir de la cárcel diariamente y regresar a dormir sólo de lunes a jueves.

La condena y posterior encarcelamiento de Pablo Hasél continúa una prolongada cadena de mordazas judiciales, entre las que corresponde mencionar la sanción a Evaristo Páramo, de La Polla Récords, y la imputación del subdirector de la revista satírica El Jueves, entre muchas otras.