El fin de semana se realizó en España el primer concierto multitudinario sin distancia social desde que comenzó la pandemia de coronavirus. La banda Love of Lesbian se presentó ante 5.000 personas en el Palau Sant Jordi de Barcelona, en un verdadero experimento sanitario.

La entrada de los asistentes se realizó en forma gradual y cada uno de ellos recibió una mascarilla FPP2, que debían sustituir por la que traían de la calle, además de pasar por un punto de gel hidroalcóholico, cuenta El Mundo.

El detalle más importante es que las 5.000 personas debieron realizarse un test de antígenos ese mismo día, en puntos designados o en la entrada del Palau. La organización informó que sólo seis de las pruebas realizadas tuvieron resultado positivo. Este dato era enviado a una aplicación en el celular y era obligatorio presentar el resultado negativo en el ingreso.

Las acciones estuvieron supervisadas por el Plan de Protección Civil de Cataluña, comité técnico que tiene la última palabra en la lucha contra la covid-19. Francia también tiene previstas actividades similares.

De esta manera, el recinto se convirtió en una “superburbuja” en la que se cantó y bailó sin distancia de seguridad. “El mundo nos mira”, dijo el músico Santi Balmes, quien pidió responsabilidad al público para no sacarse las mascarillas. “Este concierto es una pequeña batalla dentro de la guerra”, agregó.

La banda barcelonesa dedicó el concierto al personal de la salud y esencial. “Y que nunca más se nos ocurra hacer más recortes en salud, por favor”.