Tan inevitable como la caída de los grandes reinados de Westeros (o Poniente) era la llegada de una nueva serie derivada de Game of Thrones (o Juego de Tronos), que adaptó la todavía inconclusa serie de novelas de George RR Martin. Desde su cierre en 2019, se barajó la idea de una decena de spin-offs entre animaciones, precuelas y secuelas. Uno de ellos llegó hasta la etapa del piloto, pero no siguió adelante. En este enfrentamiento interno entre proyectos, que mucho se parece a las luchas intestinas dentro de alguna de las casas más reconocidas de Westeros, hubo uno que emergió como ganador y este domingo llega a la pantalla de HBO.

La Casa del Dragón (House of the Dragon) está basada en el libro de 2018 Fuego y sangre, también escrito por Martin, y en un segundo volumen que todavía no fue publicado. Ambientado 300 años antes de los acontecimientos de la saga que triunfó en todo el mundo, se centra en la casa Targaryen, que en Juego de tronos apenas sobrevivía en el exilio tras haber sido expulsada del poder unas décadas antes. Ryan J Condal, cocreador de la serie junto a Martin, comparó a esta dinastía con otros personajes muy famosos de la cultura popular, y que también se convirtieron en parte de una franquicia.

“Los Targaryen son como los Jedi de Star Wars, que te enterabas acerca de una era en la que eran muchos y muy poderosos, y siempre quisiste ver cómo era. Ahora vas a poder hacerlo”, dijo a The Hollywood Reporter. También dejó bien claras sus expectativas con respecto a su creación: “Yo era fanático de Juego de Tronos, miré el piloto la noche que salió en HBO y cada uno de los episodios siguientes. No podés continuar Juego de Tronos, es como los Beatles. Como fanático me propuse hacer el producto que yo quisiera ver, y estoy feliz con el resultado”.

El inglés de origen argentino Miguel Sapochnik, director de algunos de los episodios más recordados de la serie original, se unió a Condal para comandar La Casa del Dragón. Y en conversación con el citado medio describió de manera sencilla la historia que veremos en entregas semanales. “Los personajes principales son dos mujeres y dos hombres. Está el rey Viserys (Paddy Considine), su hermano Daemon (Matt Smith), la hija del rey, Rhaenyra, (Emma D'Arcy) y su mejor amiga, Alicent (Olivia Cooke). Luego la mejor amiga se vuelve la esposa del rey y, por lo tanto, la reina. Ya eso es complicado, cuando tu mejor amiga se casa con tu padre. Pero de las cosas más pequeñas comienza a desarrollarse una gigantesca batalla entre dos bandos”.

La historia comienza con las dos mujeres adolescentes, interpretadas por las actrices Emily Carey y Milly Alcock, y en medio de la temporada se da un salto de diez años. No será el único dentro de los diez episodios, en una estructura que se asemeja más a The Crown que a la ficción que los precedió. La acción se desarrolla principalmente en la Fortaleza Roja, la edificación ubicada en Desembarco del Rey que se viera en HBO. Varios lugares fueron recreados para esta nueva serie y resultarán familiares para los fanáticos. Además se filmó en locaciones de España, Portugal y Reino Unido.

No solamente los Targaryen fueron escasos en la serie original. Juego de Tronos comenzó sin dragones y nunca hubo más de tres, sin embargo esta vez se los promete desde el título y serán al menos 17. “La principal diferencia de esta serie es el hecho de que los dragones existen en esta era, mientras que en el show original eran una especie extinta que volvía a la vida”, explicó Condal. “Así que hay toda una infraestructura construida alrededor de ellos. Hay una fosa para dragones, monturas y guardianes de dragones, estos últimos son una orden monástica que se dedica a cuidarlos”. Cada una de las bestias tendrá un aspecto y una personalidad únicos.

Con respecto a los aspectos más polémicos de su antecesora, como la violencia sexual, los creadores dijeron que se mostrará menos, pero que en el tipo de mundo en el que están ubicados existe mucha violencia hacia la mujer, que además tenía una mortalidad muy alta al momento de dar a luz, algo que también explorará esta serie. “No se puede ignorar la violencia perpetrada por los hombres hacia las mujeres en esa época. No debería ser minimizada ni tampoco glorificada”, dijo el director.

Por último, La Casa del Dragón está protagonizada por la familia más pálida del mundo de George RR Martin y la falta de diversidad había sido una tema de conversación durante las ocho temporadas de la serie anterior. “El mundo cambió mucho entre 2011 y 2021 y también cambió lo que el público quiere ver en la pantalla”, dijo Condal. “Tuvimos conversaciones con Miguel acerca de cómo crear un elenco diverso en una forma que se sintiera orgánica con ese mundo, pero no complaciente. Y a la vez que no fueran piratas, esclavos o mercenarios, como se suele ver en otras obras de fantasía”. Steve Tousaint fue elegido para interpretar a Corlys Velaryon, la Serpiente Marina, quien sufrió acoso en las redes sociales cuando se anunció su incorporación.

Detrás de cámaras también se apostó a la inclusión, con cuatro de los diez episodios dirigidos por mujeres y un programa de tutorías para incorporar al equipo de trabajo a personas que provengan de contextos que suelen estar subrepresentados en la industria.

Martin dio su opinión del programa antes del estreno. “Es poderoso, es visceral, es oscuro, es como una tragedia shakesperiana. No hay una Arya, ese personaje que el público va a querer. Todos son defectuosos. Todos son humanos. Hacen cosas buenas. Hacen cosas malas. Los motivan el deseo de poder, los celos, las viejas heridas... justo como los seres humanos. Justo como los escribí”.

La Casa del Dragón estrena este domingo a las 22.00 por HBO y HBO Max.