El fin de semana se entregaron los premios Goya, que reconocen a lo más destacado del cine español. La gran ganadora fue La sociedad de la nieve de Juan Antonio Bayona, que partía con 13 nominaciones y se llevó 12 estatuillas. Esto dejó al drama sobre el accidente del equipo uruguayo de rugby en los Andes como la tercera película más ganadora en la historia del evento, detrás de Mar adentro (Alejandro Amenábar, 2004) con 14 premios y ¡Ay, Carmela! (Carlos Saura, 1990) con 13.

La ceremonia tuvo lugar en Valladolid y fue conducida por la actriz y cantante Ana Belén y los directores y guionistas Javier Calvo y Javier Ambrossi. La sociedad de la nieve no llegaba como el film más nominado, ya que 20.000 especies de abejas, el debut de la directora Estibaliz Urresola Solaguren, tenía 15. Sin embargo, el drama sobre las infancias trans solamente fue llamado al escenario en cinco oportunidades.

Mientras tanto, la película de Bayona fue premiada en todas las categorías por las que estuvo nominada, excepto Mejor guion adaptado, que fue para la animación Robot dreams, escrita y dirigida por Pablo Berger. Recibió estatuillas por las siguientes categorías: Mejores efectos especiales (Pau Costa, Félix Bergés y Laura Pedro); Mejor sonido (Jorge Adrados, Oriol Tarragó, Marc Orts); Mejor maquillaje y peluquería (Ana López-Puigcerver, Belén López-Puigcerver, Montse Ribé); Mejor diseño de vestuario (Julio Suárez); Mejor dirección artística (Alain Bainée); Mejor música original (Michael Giacchino); Mejor montaje (Andrés Gil, Jaume Martí); Mejor dirección de producción (Margarita Huguet); Mejor actor revelación (Matías Recalt); Mejor dirección (Bayona) y Mejor película.

También triunfó en la categoría de Mejor fotografía, en la que el premio fue para el uruguayo Pedro Luque. Al recibir el premio dijo estar “muy emocionado”, agradeció a su familia, incluyendo a su madre que lo acompañó a la ceremonia, y terminó con una anécdota: “Me acuerdo de una maestra de mi escuela pública de Uruguay que me dijo, cuando era muy chico y quizás era un poco haragán, que subir la montaña costaba mucho, pero que la vista era mucho más linda desde arriba”.

Luque: “La película ya era un éxito”

“Creo que la película ya había sido un éxito antes de los Goya porque la había visto mucha gente y eso es lo más importante. Si bien puede parecer medio superficial, el éxito de público hace que la película sea más vista, lo que quiere decir que se transmitió el mensaje más lejos y que funciona. Eso era una preocupación cuando estábamos haciéndola; que el público la entendiera, la viviera y se emocionara. En ese aspecto era un éxito y yo ya estaba feliz”, dijo Luque a la diaria.

Durante la ceremonia, el uruguayo trató de controlar los nervios, pero la emoción por sus compañeros era más fuerte. “Me puse más nervioso con los premios de los otros, pero cuando estaban abriendo el sobre no lo pude evitar, tenía el corazón a mil, y mi madre también. Fue una megaemoción. Además estaba ahí [José Luis] Alcaine, que es el fotógrafo de [Pedro] Almodóvar, un tipo de 85 años que todavía sigue trabajando. Un genio y figura. Entonces fue un gran honor”.

El director de fotografía tiene una tarea especial (ver recuadro) y Luque explicó qué destaca de su trabajo en La sociedad de la nieve: “Lo que me da más orgullo es haber logrado una película que es emocionante, en la cual la fotografía no sobrepasa la historia sino que la acompaña, y que está hecha con un montón de técnicas mezcladas que son muy complejas. Me da orgullo haber logrado dominar la técnica al punto de que no se nota y que transmite”.

“Obviamente va a venir otro proyecto, va a tener otros desafíos, y andá a saber qué pasa ahí. Con este en particular creo que todo el equipo de fotografía logró construir un mundo. El colorista de esta película, Chema Alba, un gran colorista español, me dijo que esta película definió los nuevos estándares. Que viene todo el mundo a preguntarle cómo se hizo. Y no se nota. Uno ve la película y la vive. No piensa en la técnica, ni en la fotografía, ni nada. Simplemente vive la película y la historia”, agregó.

Talentos uruguayos

Aunque se trata de una película española, “hay bastantes uruguayos en la película, empezando por el protagonista, Enzo [Vogrincic], que es un actorazo e hizo un trabajo demencial a todo nivel: a nivel físico y a nivel emocional”, dijo Luque. “Después, hay toda una parte de la producción de la película, todo el comienzo y casi todo el final, que se filmó en Uruguay. Eso implicó producción, arte, vestuario, maquillaje... Fue una producción grande para Uruguay y se cumplió”.

“En el equipo de cámara, el director de fotografía de segunda unidad, que es un rol muy importante porque tiene que cumplir con los estándares que ponemos desde la primera unidad, es uruguayo. El técnico de imagen digital es uruguayo. El operador de la cámara B, que también tiene su responsabilidad muy grande porque tiene que construir un mundo, también es uruguayo”, detalló. Este éxito “va a repercutir porque visibiliza al país y muestra una factura técnica superlativa, que demuestra que se puede hacer ahí también. Que es una cuestión de recursos, quizás. Y sobre todo te pone en el boca a boca. Eso es súper importante”, opinó.

Actualmente, Luque está filmando comerciales y leyendo guiones para posibles largometrajes. Y también “disfrutando un poco”.

¿Qué hace un director de fotografía?

En 2018, cuando Luque se encontraba trabajando para la serie Swamp Thing, contó a la diaria en qué consistía el rol de un director de fotografía. "Es el encargado de encontrar cómo la película, o lo que sea que estés haciendo, se tiene que ver. Es un trabajo de investigación, al principio, y de llevar esas palabras que están en un guion a imágenes", explicó con paciencia.

"Cuando voy leyendo un guion, voy imaginándome qué sería adecuado para cada escena: si es oscura, si es clara, si es azul, roja o amarilla. Y de ahí, a dirigir un equipo de cámaras, luces, posproducción, retoque de color en el set y todo el resto de los equipos que ponen colores dentro del set; el diseñador de producción, el director de arte, la vestuarista... Conducirlos para que esa imagen tenga una coherencia, una fuerza y una expresividad. Que diga algo. Que ayude al guion de alguna manera a transformarse en una imagen y potenciar su significado".